15/10/2024 00:26
15/10/2024 00:25
15/10/2024 00:24
15/10/2024 00:24
15/10/2024 00:23
15/10/2024 00:23
15/10/2024 00:21
15/10/2024 00:14
15/10/2024 00:13
15/10/2024 00:13
» Misioneslider
Fecha: 14/10/2024 21:56
La Real Academia Sueca de Ciencias ha otorgado el Premio Nobel de Economía 2024 a Daron Acemoglu, Simon Johnson y James A. Robinson por sus investigaciones sobre cómo las instituciones influyen en la prosperidad o el fracaso de las naciones. Este reconocimiento se basa en el estudio detallado de las estructuras institucionales en países en desarrollo, como Argentina, y su impacto en los problemas estructurales que enfrentan. En su obra más destacada, «Por qué fracasan los países», los autores exploran cómo las deficiencias en las instituciones contribuyen a la perpetuación de la pobreza y la desigualdad, conceptos fundamentales para comprender el estancamiento argentino. **Premio Nobel de Economía explicó la crisis argentina** James A. Robinson, experto en América Latina, ha analizado a fondo la situación de Argentina y ha utilizado el concepto de «Leviatán de papel» para describir países que, a pesar de tener una apariencia de Estado moderno, fallan en proporcionar efectivamente bienes y servicios públicos. En su colaboración con Acemoglu en el libro «El pasillo estrecho», Robinson argumenta que, aunque Argentina cuenta con las estructuras formales de un Estado, su capacidad de gestión se ve limitada por el clientelismo y el patrimonialismo. En su análisis, Robinson destaca que Argentina se encuentra en una categoría especial de «Estado débil conjugado con una sociedad débil», donde el clientelismo prevalece y el Estado se utiliza para obtener apoyo político en lugar de enfocarse en la provisión de bienes públicos. Esta dinámica, arraigada en la historia política del país, se refleja en la presencia de los «ñoquis», empleados estatales que reciben un salario sin cumplir sus funciones, lo que ejemplifica el clientelismo que permea el sistema político argentino. **La receta de James A. Robinson para salir de la crisis** A pesar de su diagnóstico crítico, Robinson sostiene que Argentina no está condenada al fracaso y que tiene la capacidad de avanzar. Sin embargo, para lograrlo, el país necesita una reforma institucional profunda que fortalezca sus estructuras y genere un sistema de incentivos que fomente la productividad y la competitividad. Según Robinson, estos elementos son cruciales para superar los obstáculos al crecimiento económico en Argentina. En cuanto a la cultura del trabajo, Robinson reconoce el esfuerzo de los argentinos, pero señala que el entorno institucional y los incentivos actuales no están alineados con el desarrollo económico. Esta discrepancia impide que el trabajo duro de los ciudadanos se traduzca en progreso, debido a las debilidades estructurales del país. En resumen, las investigaciones de los galardonados con el Premio Nobel de Economía 2024 ofrecen una perspectiva valiosa sobre la importancia de las instituciones en el desarrollo de las naciones, destacando cómo el clientelismo y la debilidad institucional han impactado la crisis argentina. Su análisis subraya la necesidad de reformas profundas para fortalecer las estructuras y promover un entorno que incentive el crecimiento y la competitividad económica en el país.
Ver noticia original
 (1).png)
 (1).jpg)
Examedia © 2024
Desarrollado por