08/10/2024 21:34
08/10/2024 21:34
08/10/2024 21:33
08/10/2024 21:33
08/10/2024 21:32
08/10/2024 21:32
08/10/2024 21:31
08/10/2024 21:31
08/10/2024 21:31
08/10/2024 21:30
» Diario Cordoba
Fecha: 08/10/2024 19:15
En la recta final del año, dos empresas han dado el paso para saltar a Bolsa. La catalana Europastry, el mayor fabricante de panes, cruasanes y otras bollerías industriales y propiedad de la familia Gallés, tocará la campana este jueves en Barcelona con una valoración estimada de 1.500 millones. Además, la alicantina Cox también ha anunciado este lunes sus planes para salir al Mercado Continuo con una filial el próximo mes con una colocación de 300 millones. Enrique Riquelme, presidente de la energética, estima una valoración de su compañía en unos 1.200 millones. Estos dos grupos, junto a Puig, serán los nombres propios que se recordarán de las OPV en 2024, un ejercicio llamado a desatascar los estrenos bursátiles, pero los analistas apuntan a que la bajada del precio del dinero y el furor por la renta fija en este ejercicio han desanimado a que más firmas se hayan lanzado a cotizar. Numerosas empresas anunciaron ambiciosos debuts en el parqué en 2024, como Tendam, Cirsa o Astara, pero la expectativa de que el precio del dinero baja el próximo ejercicio y la apuesta por los bonos han limitado los estrenos bursátiles. "Pensamos que el contexto actual invita a que las empresas posponga sus salidas a Bolsa para 2025. El mercado ya ha descontado tres bajadas de tipos en las próximas cuatro reuniones del Banco Central Europeo", asegura Javier Cabrera, analista de mercado. El protagonismo de la renta fija durante el actual ejercicio también otro de los factores que explican que se hayan producido más estrenos bursátiles. "Pensábamos que en este ejercicio habría más salidas a Bolsa que las que se han producido. Ha sido un ejercicio en el que se ha apostado mucho por la renta fija. Muchas carteras han apostado más por la renta fija que por la variable", indica Sara Hernández, directora de análisis de Norbolsa, que vaticina que es poco probable que más empresas puedan completar su salida al mercado este año. "Las que tengan planes de cotizar ya los estarán preparando para 2025", explica. "Para muchos inversores ha podido ser un año decepcionante. Cada año hablamos de, al menos, cinco o seis empresas preparadas para dar el salto al parqué. Sin embargo, desde un punto de vista objetivo es normal. Los tipos se han mantenido en los niveles más altos de las últimas décadas, a la vez que todavía no había demasiada luz sobre la inflación. En una situación así, es complicado que una compañía salga al mercado con la valoración deseada, ya que los inversores exigen mucha más rentabilidad a este tipo de inversiones en un contexto de tipos de interés altos", desarrolla el analista Javier Cabrera. Cabe mencionar el caso de Puig, la primera salida a Bolsa del año, sufrió un descalabro en sus primeros resultados como empresa cotizada y recortó un 27% el beneficio en los seis primeros meses del año hasta los 154 millones de euros debido a los costes de su salida a Bolsa, según aseguró la propia compañía en la presentación de sus primeros resultados como empresa cotizada. El grupo se estrenó en Bolsa el pasado 3 de mayo con un precio de 24,5 euros por acción y llegó al Ibex el pasado 22 de julio. Los títulos de la compañía han caído más de un 17% desde el debut de la compañía y actualmente cotizan sobre los 20 euros. Expectativas para 2025 Una de las compañías que ya ha declarado su intención de intentar un nuevo salto a Bolsa es Cirsa, pero ha aclarado que lo intentará ya en la primera mitad de 2025. Otro grupo como Tendam, Astara, Cosentino, Volotea o Ibercaja también han explorado planes para empezar a cotizar, pero es poco probable que haya nuevas incorporaciones en lo que resta de ejercicio. "Parece que ahora la situación es algo mejor que otros años. Son buenas noticias para un mercado que en el último año ha perdido muchas compañías, que han dejado de cotizar", explica Juan José Fernández-Figares, analista de Link Securities. Este analista hace referencia a compañías que en los últimos años han sido excluidas de cotización al ser compradas. Y señala a otras que podrían seguir el mismo camino, como Grifols, Lars o Talgo. "La realidad es que más compañía abandonan el mercado continuo que las nuevas que entran. En el BME Growth hay algo más de movimiento, pero son compañías pequeñas, sin apenas seguimiento", concluye Figares.
Ver noticia original
 (1).jpg)
Examedia © 2024
Desarrollado por