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» Diario Cordoba
Fecha: 02/10/2024 08:34
El lodazal del caso del rapero Sean 'Diddy' Combs está adquiriendo dimensiones estratosféricas. Este martes se ha sabido que un niño de 9 años se encuentra entre las 120 personas que van a acusar al magnate del rap de agresión, violación y abuso sexual en demandas inminentes, según ha anunciado el abogado de este colectivo. El letrado Tony Buzbee, con sede en Houston (Texas), dio una rueda de prensa el martes 1 de octubre, en la que explicó que Combs abusó sexualmente de varios menores. Buzbee explicó que un niño de 9 años fue abusado sexualmente después de una audición en el estudio Bad Boy Records en la ciudad de Nueva York. "También había otros chicos allí para hacer la audición", recordó Buzbee. "Todos ellos estaban tratando de conseguir un contrato discográfico. Todos eran menores de edad. Este individuo [el niño de 9 años] fue abusado sexualmente, supuestamente por Sean Combs y otras personas del estudio con la promesa a sus padres y a él mismo de conseguir un contrato discográfico", continuó el abogado. 25 menores Buzbee dijo que su firma de abogados, junto con AVA Law Group, ha sido contratados por al menos 120 personas, hombres y mujeres, para presentar demandas civiles contra Combs. Del total, 25 de las presuntas víctimas son menores de edad, anunció Buzbee. Según 'People', Buzbee planea presentar las demandas en varios estados en los próximos 30 días. Tranquilizante para caballos La mayoría de las víctimas relataron que fueron drogadas y que se encontró tranquilizante para caballos en varias pruebas de drogas. El equipo legal de Buzbee aseguró haberse puesto en contacto con más de 3.000 personas que aseguran haber sido víctimas de Combs. El cantante, de 54 años, fue arrestado a mediados de septiembre acusado de tres cargos de crimen organizado, tráfico sexual y trata de personas. El juez le impuso prisión preventiva a la espera de juicio. Su arresto ocurrió tras haber recibido durante el último año 10 demandas de abuso sexual y violación por parte de diversas mujeres, unas acusaciones que Combs ha negado. Sin embargo, tras su detención, han surgido nuevos casos en su contra. La acusación asegura que el rapero estadounidense forzaba encuentros entre mujeres y trabajadores sexuales masculinos, llamados 'freak offs', que normalmente incluían consumo de drogas, como éxtasis o ketamina, y que podían durar días. Según la Fiscalía, en una ocasión llegó a pagar más de 46.000 dólares para cubrir los daños causados a una habitación de un hotel de Manhattan tras una de estas orgías.
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