01/10/2024 08:32
01/10/2024 08:32
01/10/2024 08:31
01/10/2024 08:30
01/10/2024 08:30
01/10/2024 08:30
01/10/2024 08:30
01/10/2024 08:30
01/10/2024 08:30
01/10/2024 08:30
» Diario Cordoba
Fecha: 01/10/2024 02:47
Córdoba es una ciudad privilegiada para el poema. No existió, a principios de siglo, una ciudad tan volcada al ejercicio poemático como la capital cordobesa. Así de claro lo expresa Andrés Moriel, autor del libro Poetas en la espiral. La generación del 2000. Estudio y antología (1997-2022), publicado en Utopía, y que hace un repaso, precisamente, a esa generación que vino a representar a las voces de principios del siglo XXI en la ciudad, convirtiéndose en un grupo de escritores y poetas, muy jóvenes, que removieron la tradición, bebieron de ella, pero crearon su propia identidad. Pablo García Casado, José Luis Rey, Rafael Espejo, Elena Medel, José Daniel García, Juan Antonio Bernier y Joaquín Pérez Azaústre protagonizan el libro, una generación de autores ya fraguada y consolidada que merecía ser contada. Se trata de un estudio sobre los poetas vinculados con la tradición, que no tradicionales, que la usaron para negarla y dimensionarla. A mí juicio -dice Moriel- "son los que mejor sobrevuelan la tradición de la espiral poética", eso del buscar en las lecturas de poetas anteriores su mirada propia, una quizás más moderna. Son más, pero el autor está preparando otro material que los incluya y que verá frutos en el futuro. La generación más importante de los últimos años La generación del 2000 en Córdoba es quizás, desde la de Cántico, la generación de poetas más importante que ha surgido en los últimos años. Son los últimos nacidos en Franquismo o a principios de la Transición, los últimos que pasaron su juventud sin teléfono móvil y los que leen de libros, sin pantallas. "Son los últimos en un mundo que ya no existe, porque hoy las influencias son distintas", resalta el autor desde los Cosmoversos de la Sala Orive, en un intento de dimensionar la importancia del grupo para la creación artística cordobesa. Andrés Moriel, autor del libro 'Poetas en la espiral', en conversación con la prensa. / Víctor Castro En las calles de Córdoba parece que brota la poesía, es "tierra santa". "Allá por donde he vivido siempre he tenido a Córdoba como un lugar para la poesía", cuenta Andrés Moriel, que resalta las voces tan potentes que surgieron y que fueron, en parte, la semilla para el nacimiento de Cosmopoética. "Es tan importante este festival que es como algo misterioso, nadie sabe cómo surgió", porque en la época había incontables focos para la creación literaria en la ciudad. "Al no haber una línea estética predominante, nuestra generación refleja la diversidad y pluralidad poética de la España del momento. No se nos podía atribuir un posicionamiento estético", agrega a la conversación Joaquín Pérez Azaústre, que ha querido destacar lo significativo que es que sea un sevillano el que se decide a hacer un análisis sobre su generación poética, bridando una mirada exterior. "Con todas las luces y sombras, hubo un momento de eclosión de la literatura escrita en Córdoba en el año 2000", agrega. Esa eclosión incluyó una trascendencia en la crítica y en lo editorial. Se publicaban, en la época, grandes páginas en los periódicos, artículos y críticas sobre lo que estaban diciendo o publicando los poetas del 2000. "Lo que decíamos generaba un debate muy vivo", recuerda Pérez Azaústre, quizás con algo de nostalgia porque, afirma, las nuevas generaciones no se lo pueden imaginar y porque "el hecho poético dejó de ser una capilla para convertirse en algo de lo que la gente hablaba". Su generación ha sido duramente golpeada por la muerte. Recuerdan en la conversación a Carmen Jodra, Adolfo Cueto, Eduardo García o Manuel Lara Cantizani. Con ellos "se ha cerrado una etapa y un ciclo" y ahora toca darle espacio y abrirle las puertas a los que vienen. Más en Cosmopoética Por la mañana Cosmopoética se llena de contenido joven y este lunes tuvo lugar el taller Manos es más para acercar las claves del lenguaje poético a través de las claves del lenguaje entre adolescentes, impartido por Alejandra Vanessa, Lucía Sánchez Borrero en el IES Blas Infante. Además de la presentación de Andrés Moriel y la generación del 2000, también tuvieron espacio Antonio Díaz Mola y Lucía Sánchez Borrero dentro de los Cosmoversos. Lola herrera, en un momento de su recital este lunes en Cosmopoética. / CÓRDOBA Por último, Lola Herrera ha deleitado al público con Tres corazones infinitos, su nueva propuesta en torno a los tres autores que más la han marcado en su trayectoria vital, Lorca, Machado y Miguel Hernández en un precioso recital lleno de música y poesía. Con el piano de fondo de Víctor Carbajo la actriz Lola Herrera han ido desgranando los poemas mientras el barítono Luis Santana ha acompañado los versos con canciones seleccionadas en función del autor y la época. Los poemas elegidos componen un recorrido sentimental, filosófico, humorístico y social. Suscríbete para seguir leyendo
Ver noticia original
 (1).jpg)
Examedia © 2024
Desarrollado por