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» Diario Cordoba
Fecha: 29/09/2024 09:46
El presidente del casino de Puente Genil, Javier Sánchez, ha anunciado el inminente inicio de las obras para restaurar la fachada del casino, uno de los edificios más emblemáticos de la localidad, un lugar único que vuelve a ser este último fin de semana del mes de septiembre escenario de la Velada del Membrillo, coincidiendo con el «veranillo de San Miguel». El edificio data de 1897 y «le hace falta un mantenimiento, porque se han caído molduras de escayola y es un peligro». A partir de ahí, indica Sánchez, «hemos estudiado la fórmula de rehabilitación haciendo un proyecto que no es sólo retocar sino ir a fondo con la fachada». La actuación va a requerir una partida presupuestaria que asciende a 85.000 euros más IVA, de los cuales un tercio tendrá que abonar el Ayuntamiento, ya que es propietario de una de las tres plantas (destinada a la Oficina de Obras y Urbanismo) y el resto se acometerá con los fondos del Casino, para lo cual, según indica su presidente, «no necesitaremos subvención». El arquitecto Francisco Gómez de Tejada, encargado de la reforma, explica que esta va a afectar de forma íntegra a la fachada con todas sus partes, molduras de escayola, de mortero, de piedra, así como las cornisas, cerrajería y carpintería de madera. Buena conservación A pesar de que todos los elementos originales están bien conservados, «necesita una restauración porque además se ha ido modificando el color, por lo que vamos a intentar recuperarlo», apunta. De esta forma, «con los colores originales podremos recuperar la fachada de principios del siglo XX como tenemos en fotos, en color blanco y gris clarito». Recordó que a partir de los años 20 en Andalucía, con «la llegada de los regionalismos, se pintaron muchos edificios como el color albero», el que actualmente mantiene el edificio. Se trata de un edificio «de los más importantes arquitectónicos en Puente Genil y está protegido en el PGOU como grado 1». Inspirado en Venecia El edificio del actual Casino Pontanés es uno de los más emblemáticos de Puente Genil. Concebido inicialmente como una vivienda unifamiliar con una cafetería en la planta baja, seguramente fue el primer edificio de la ciudad con mezcla de usos. Fue promovido por Antonio López Muñoz (El Palomo) y su esposa, Remedios Avisbal Luque, y diseñado por Rodrigo García Luque inspirándose en el palacio renacentista Vendramin Calergi de Venecia, dentro del estilo historicista propio de finales del XIX y principios del XX. Sorprendentemente, el edificio ha conservado fielmente su estética y estructura original a lo largo de sus más de 125 años de historia. La disposición de los huecos, las alturas, las molduras e incluso las carpinterías de madera y la cerrajería son las originales del siglo XIX, y han llegado hasta nuestros días en un perfecto estado de conservación. Recreación de la fachada tras su restauración. / F. GÓMEZ DE TEJADA La principal modificación que se ha realizado ha sido en el cuerpo inferior, en el que, aunque se ha mantenido la disposición de los huecos y parte de las carpinterías originales, se han modificado los accesos y la parte inferior de las carpinterías de madera. Los nuevos usos que el edificio lleva albergando desde los años 50 del siglo pasado, así como el cambio de la rasante de la calle, obligaron a la modificación de dichos accesos. Revitalización Actualmente el Casino Pontanés atraviesa una etapa de revitalización, gracias a la incansable organización de actividades lúdicas y culturales abiertas a toda la sociedad pontanesa, habiéndose convertido en punto de encuentro de asociaciones, amigos y tertulias intergeneracionales y coordinado por una junta directiva conformada por Javier Sánchez Pérez (presidente), Javier Villafranca Muñoz (secretario), Javier Álvarez de Sotomayor Reina (tesorero) y los vocales Manuel Berral Prieto, Manuel Sebastianes Morales, Mario Reina Fernández, Daniel Jurado Cosano y Joaquín Ruiz Baena. En su interior se respira un ambiente joven, atractivo y dinámico enmarcado en el encanto de un edificio de 125 años, conservado prácticamente en su estado original, disfrutando aún de mobiliario que fue propiedad de sus promotores Alberto López Muñoz y Remedios Avisbal Luque, y costeado durante décadas gracias a la generosidad de los casi doscientos socios que hoy lo conforman. Un edificio original, precioso y evocador en el que todavía hoy se advierten las claras influencias del palacio veneciano Vendramin Calergi, aquel en el que el 13 de febrero de 1883 perdiera la vida el genial compositor y director de orquesta Richard Wagner. Suscríbete para seguir leyendo
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