24/09/2024 04:09
24/09/2024 04:08
24/09/2024 04:07
24/09/2024 04:07
24/09/2024 04:06
24/09/2024 04:05
24/09/2024 04:05
24/09/2024 04:05
24/09/2024 04:04
24/09/2024 03:56
» Diario Cordoba
Fecha: 24/09/2024 01:17
Luis Cortés pasa más horas en el estudio que en casa. Ha hallado allí el lugar perfecto para dejarse fluir. No sólo en lo musical, también en lo personal. Aunque, a veces, ambas esferas vayan de la mano. Tiene 23 primaveras y ríe tanto como canta. Es curioso que lo haga con tal energía cuando el pasado, en ocasiones, pesa demasiado. No le gusta mirar atrás, por eso se enfoca tanto en las canciones. Son su terapia particular y, claro, frente a las dudas, la mejor respuesta está bien adentro. Como sus armonías. “Dios me ha dado el duende”, dice. Ese pellizquito que, cuando trabajaba de noche para llevar dinero a casa, le animaba a luchar por su sueño. Hoy, reconvertido en un ídolo de masas en TikTok, sabe todo lo que le ha costado. Cantarín y alegre, atiende a El Periódico de España en plena gira de presentación de Dolores. “Me pillas componiendo”, asegura entre risas. De fondo se escucha barullo, él suele currar en equipo. No ha estudiado música, pero eso no le ha impedido firmar un cancionero de raíz flamenca. Aprende a diario, de quienes le inspiran: “Son mi inspiración. Hay quien hace primero la letra y, después, la melodía. Otros que lo hacen al revés. Nosotros nos adaptamos. Siempre tratamos de mejorar”. Su primer tema, Ojalá, roza los dos millones de reproducciones. Han pasado cinco años y, si bien pocas cosas han cambiado en él, se intuye cierta madurez en sus nuevas creaciones. Curtido en Las 613 viviendas de Burjasot (Valencia), ha hecho del barrio un refugio donde resguardarse a menudo. Entre tanto viaje, bajar a tierra le sienta de maravilla. Aquí adquirió los principios sobre los que ha sustentado su vida. Los mismo que ahora vertebran su carrera artística. “Hay gitanos, negros, moros… He aprendido a respetar y cuidar al otro. Sigo viviendo aquí”. Él, de madre gitana y padre africano, es el vivo ejemplo de que la convivencia es posible. Aún cuando las condiciones no sean las mejores para un chaval de su edad. De hecho, tuvo que ponerse a trabajar bien pronto para sacar adelante a su familia. “Cuidar de mis hermanos y madrugar para mover pallets me hizo madurar. Me tocó y ya está. En el fondo, no dejaba de ser un chaval que quería hacer cosas. Mi madre trabajaba, pero yo notaba cositas. Con tal de verla feliz, hacía cualquier cosa”, recuerda. A ella, precisamente, le dedica el tema que tantas mieles le está dando. Mama alcanza los cuatro millones de escuchas en Spotify, aunque para él las cifras son lo de menos. Quiere permanecer y, para ello, la clave está en dejar huella en sus seguidores. ¿Cómo? Escribiendo estrofas en las que todos puedan verse reflejados. A pesar de su corta edad, las historias que paladea bien podrían sentirse en toda piel. Abrir el cajón “La música me ha ayudado a seguir adelante. Cuando la descubrí, se me destapó otro mundo delante. Es como si, de repente, te dicen que en Marte hay personas y que andan con normalidad. Encontré un sitio donde expresar aquello que tengo en el pecho. Siento que las canciones han sido agua en el desierto”, sostiene Luis, que ya está pensando en las próximas. Un ejercicio de introspección que, aunque doloroso por momentos, siempre acaba con un halo de luz: “Duele abrir el cajón y hurgar. Todo lo que me pasa trato de guardármelo en una nota de voz. Es la forma que tengo de ir apuntando las ideas que, más tarde, desarrollo en el estudio”. Hace nada estuvo en Miami, haciendo piña con otros compositores. La experiencia le recordó a una película de Hollywood, con sus cócteles y terrazas, viendo amanecer, pero, por suerte, regresar a su barriada le devolvió de inmediato a la realidad. Una que, ojo, le sienta de fábula. Porque Luis, ante todo, es un chico de zapateo profundo. Aquel que sólo es posible si compartes el presente con los tuyos. “Si tuviera delante a aquel niño que soñaba con cantar, le diría que no se diera tanta prisa en crecer. Los pequeños detalles son los que marcan nuestras vidas”, subraya. La suya… y las nuestras. P. ¿Qué le dice su madre hoy convertido en la última sensación de TikTok? R. Está súper contenta. Le encanta lo que hago y se lo enseña a sus amigas. Está orgullosa, supongo. Habría que preguntarle. Paso mucho tiempo con ella, la verdad. Es la persona que más admiro, un ejemplo a seguir. Tiene una fuerza increíble.
Ver noticia original
 (1).jpg)
:quality(85)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/infobae/WJIYEHGBZRH5DBKP7A6QMAU24U.jpg)
Examedia © 2024
Desarrollado por