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» Sin Mordaza
Fecha: 18/09/2024 10:45
El Gobierno anunció la eliminación de la Licencia Nacional de Transporte Interjurisdiccional (LINTI) para camiones de carga, como parte de una serie de reformas orientadas a reducir la burocracia y los costos asociados para el sector. La medida, impulsada por el Ministerio de Desregulación a cargo de Federico Sturzenegger y la Secretaría de Transporte dirigida por Franco Mogetta, busca simplificar el trámite que históricamente había sido conocido como el "registro Moyano", debido a que en sus inicios, los controles de salud se realizaban en clínicas asociadas a la obra social de los camioneros, SICHOCA. Hasta ahora, el LINTI representaba un costo anual considerable para los conductores de camiones. Obtener la licencia implicaba pasar un examen de idoneidad —que verificaba las habilidades de manejo— y una revisión médica, cuyo costo alcanzaba los $33.000 anuales por la revisación psicofísica. A esto se sumaba un costo adicional de $96.000 por el examen de idoneidad. Ambos procesos, que se debían realizar de forma anual, eran un punto de crítica por parte de las empresas de transporte debido a la carga económica y logística que suponían. Con la nueva medida, el gobierno ha decidido que, al contar ya con una licencia de conducir habilitante, no es necesario que los camioneros obtengan una segunda licencia para operar entre jurisdicciones. Así, los choferes solo necesitarán la licencia nacional de conducir para circular, eliminando la exigencia de la LINTI. Este cambio se oficializará en 60 días, cuando la norma entre plenamente en vigencia. La eliminación del LINTI ha sido bien recibida por parte de la industria automotriz y pequeños transportistas, quienes señalan que la medida permitirá un ahorro significativo en los costos operativos. Eliminar el trámite beneficia a contratistas, como jardineros o mecánicos, que usan vehículos utilitarios para transportar sus herramientas y no se dedican exclusivamente al transporte de cargas. Además, el cambio podría impulsar las ventas de camionetas y utilitarios, al eliminar el requisito de obtener una licencia extra para este tipo de vehículos. Otra de las medidas incluidas en esta reforma es la digitalización y simplificación del Registro Único del Transporte Automotor (RUTA). Hasta ahora, el RUTA requería un trámite presencial y pago que tomaba más de 70 días para completarse. Con la nueva normativa, este proceso será digital, gratuito y declarativo, lo que reducirá significativamente los tiempos de inscripción a tan solo cinco días. Esto representa, según cálculos del Ministerio de Desregulación, un ahorro de $500 millones para el sector privado. Además, el decreto 832/2024 eleva el límite de capacidad de carga para la obligatoriedad del registro de 700 kg a 3500 kg, lo que excluye de la exigencia a vehículos como camionetas, furgones y casas rodantes que no se dedican exclusivamente al transporte de cargas. Este cambio reducirá considerablemente el número de transportistas obligados a inscribirse en el RUTA, beneficiando particularmente a pequeños contratistas y particulares que utilizan sus vehículos para actividades recreativas o de trabajo no relacionado directamente con el transporte de mercancías.
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