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» Diario Cordoba
Fecha: 15/09/2024 12:17
El 9 de diciembre de 2007 se publicó en Diario CÓRDOBA un artículo titulado La soledad de Guadalcázar. Se llamaba la atención sobre los valores naturales de este municipio ciertamente escondido y no observable desde las vías de comunicación, y se le describía como un pueblo perdido en la Campiña. Desde entonces, han pasado casi 17 años y el paisaje está cambiando de forma acelerada. En primer lugar, los olivares superintensivos comenzaron a ocupar las superficies agrícolas cerealistas, proceso que aún sigue. En la actualidad también se instalan plantas solares fotovoltaicas, que ocuparán varios miles de hectáreas casi continuas de seguir el ritmo. Una gran isla se extiende al suroeste, superficie de materiales oscuros a las mismas puertas de la localidad de Guadalcázar. La última iniciativa es una planta solar fotovoltaica para producción de hidrógeno verde. Puede llegar a ocupar casi 1.500 hectáreas que se añadirían a las autorizadas. Difícil papeleta tienen las autoridades ambientales e industriales y el gobierno municipal de este pueblo que será el último en autorizar o desestimar el proyecto, teniendo en cuenta los informes preceptivos. Tienen que decidir el futuro que quieren para sus vecinos, subirse al carro de las energías renovables que no han sufrido un proceso de planificación, donde se ha obviado la participación social y alterar el paisaje de casi el 35% de la superficie del término municipal, o bien, no seguir consumiendo más territorio con este uso industrial a iniciativa de grandes empresas y fondos de inversión que no tienen en cuenta sus efectos, y dar por concluida su cuota con las energías renovables. La última iniciativa es una planta solar fotovoltaica para producción de hidrógeno verde Este megaproyecto va a requerir unos importantes volúmenes de agua, tal y como fue publicado por la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir el día 2 de julio de este año en el BOE, como convocatoria de proyectos de concesión de aguas públicas. Serán necesarios 3.422.382 m³/año, lo que consumen 2.282 hectáreas de olivares superintensivos. De este volumen, 1.311.189 m³/año procederán de 5 sondeos de aguas subterráneas y el resto, 2.111.193 m³/año, de cinco arroyos del entorno, entre ellos la Marota y el Guadalmazán, cursos fluviales emblemáticos de este área, responsables de gran parte de la riqueza natural del entorno de Guadalcázar. Biodiversidad Habrá que analizar los efectos que van a tener estas extracciones sobre los arroyos y la biodiversidad que albergan, así como sobre los acuíferos de la zona. Si realizamos algunos cálculos, al arroyo de la Marota es como si le extrajeran unos 22,62 litros por segundo de manera continua, y 42,94 l/seg al arroyo de Guadalmazán. Estas cifras suponen el detraimiento de un importante caudal que no circulará por su cauce. Dejará de llegar al río Guadalquivir y parte no se infiltrará en sus orillas. Además, estos cursos fluviales quedarán rodeados por la planta solar en gran parte de su longitud. Prácticamente desaparecerán del paisaje como entidad propia. La Nasa ha indicado que Andalucía tendrá en 2050 más de tres meses con más de 35º C Científicos de la Universidad japonesa de Kyushu han estudiado las tendencias de la temperatura de la superficie terrestre (TST) debidas a la instalación de paneles fotovoltaicos en torno a la cuenca del río Kushida, situada en el centro de Japón. La zona investigada abarca una superficie total de 767,62 km2, de la que los bosques y las tierras de cultivo representan alrededor del 81%. Evaluaron los cambios de temperatura de la superficie en los lugares de instalación fotovoltaica a lo largo de diferentes estaciones y años, durante 10 años. El estudio descubrió que «la TST alrededor de las instalaciones fotovoltaicas que se construyeron entre 2013 y 2023 aumentó una media de 2,85 ºC», y «desde una perspectiva estacional, el efecto de la TST es más pronunciado (+3,35 ºC) en los meses más cálidos y más moderado (+2,5 ºC) en los meses más fríos». De acuerdo con estos datos, es casi seguro que la isla fotovoltaica se transforme en una isla de calor. En una zona de altas temperaturas, en un escenario de cambio climático con incremento de las olas de calor, cada vez más severas, y mayor número de noches tropicales, se le sumaría un efecto local de más aumento de las temperaturas. Esto implica que el índice de muertes por estrés térmico incrementará su probabilidad. Este megaproyecto fotovoltaico va a requerir unos importantes volúmenes de agua Los científicos que realizan estudios climáticos globales utilizan otra medida de estrés térmico, la llamada temperatura de bulbo húmedo, que es la temperatura más baja a la que un objeto puede enfriarse cuando la humedad se evapora de él. Algunos autores señalan que a la más alta que los humanos pueden sobrevivir cuando están expuestos a los elementos durante al menos seis horas es de aproximadamente 35º C. La Nasa ha indicado que Andalucía experimentará más de tres meses con temperaturas de 35º C o más en 2050. Temperatura y humedad, una combinación a tener en cuenta. A 35 años vista Todos estos datos hay que tenerlos en cuenta ya que pueden hipotecar durante 35 años este territorio. El uso racional del agua y el incremento de la temperatura con afección a la vida humana pueden ser claves para adoptar una decisión sobre nuevas plantas solares fotovoltaicas en esta área de Guadalcázar, que parece haber superado su cuota de solidaridad. Suscríbete para seguir leyendo
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