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  • Entre Ríos, Argentina

  • Destruyeron casi 2.500 plantas cítricas para prevenir el HLB

    Parana » Uno

    Fecha: 13/09/2024 07:58

    Los cítricos eran comercializados en la ruta nacional 14. El objetivo es evitar el contagio de HLB, considerada la enfermedad más devastadora para el citrus. Personal del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) destruyó alrededor de unas 2.500 plantas de cítricos en la provincia de Entre Ríos, para evitar la propagación de la enfermedad denominada Huanglongbing (HLB) . Se hallaron en una zona "bajo cuarentena". El operativo se realizó cerca de la localidad de Chajarí, a la vera de la autovía nacional 14, ya que no cumplía con las normativas sanitarias vigentes, no tenía la producción bajo cubierta y en una zona que permanece en cuarentena para no permitir la transmisión de la enfermedad. ¿Qué es el HLB? El HLB es causado por la bacteria Candidatus liberibacter, considerada como “la enfermedad más destructiva de los cítricos” ya que se dispersa con mucha rapidez antes de mostrar síntomas masivos y hasta el momento no tiene cura. La bacteria se implanta con un insecto "muy similar a la chicharrita de maíz", que en su etapa de ninfa es de coloración variada, con un cuerpo aplanado ovoide con ojos rojos y antenas negras y alas en desarrollo. El insecto coloca el virus en la plantación y bloquea los vasos vasculares del vegetal. Sin embargo, la aparición de síntomas visibles "puede demorar de 2 a 10 años: la fruta no madura, queda de un tamaño menor, deforme, amarga y más ácida que un limón", dijo a UNO el ingeniero agrónomo y director de Agricultura de Entre Ríos, Gustavo Oertlin. Asimismo, las hojas comienzan a decolorarse y, en un cítrico afectado, la planta "se ve amarillenta y con mucho menos vigor". Por esos motivos, las pérdidas de producción "son totales. Lo único que nos queda es recorrer las quintas y monitorear, plantas por planta, para detectar los síntomas", completó el funcionario provincial. exportación citrus fruta campos entrerrianos.jpg Destrucción de plantas Esta semana el Senasa detectó 2.447 plantas cítricas que se encontraban en venta en comercios que "no tenían habilitación como revendedores en el Registro de Viveros (Renfo) ni el Documento de Tránsito Vegetal electrónico (DTV-e) que acredite su origen y estado sanitario", explicaron a UNO desde el organismo nacional. En el marco del Programa Nacional de Prevención del Huanglonbing, los agentes del organismo nacional notificaron a los puesteros y comerciantes de la Resolución que prohíbe la venta ambulante de plantas por representar un alto riesgo fitosanitario. Además, la situación configuraba una transgresión a las resoluciones del Senasa 930/09; 875/20 y 27/19 así como a la Ley N° 26.888 por lo que se procedió a la constatación y destrucción por parte de los transgresores, del total del material cítrico. Prevención y control La Federación del Citrus de Entre Ríos (Fecier), el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el Gobierno provincial y los productores entrerrianos elaboraron un plan de información, prevención y concientización para que los productores puedan realizar una detección temprana del HLB, para evitar su propagación en otras plantas. También durante los últimos meses se capacitaron a más de 700 productores en cómo identificar la sintomatología en plantas. En Entre Ríos existen alrededor de 1.900 productores citrícolas que cultivan unas 36.387 hectáreas, y comercializan anualmente cerca de 740.000 toneladas. Además, la producción citrícola es considerada el principal motor económico del noreste entrerriano, con más de 25.000 empleos directos, según datos oficiales, a los que se le suman personas que arriban de otras provincias para las épocas de siembra o cosecha. Para evitar una fuerte propagación, los distintos actores de la cadena productiva acordaron virar la forma de producción: se generó una reconversión de los viveros -que antes eran en campos abiertos-, y hoy se hacen en invernaderos cubiertos con una malla anti insectos, con medidas de bioseguridad para que no ingrese la chicharrita. Además, para su control en el terreno, personal de los organismos y asociaciones trabajan como monitoreadores. Cada uno tiene su equipo con un GPS, un aspirador de diaphorina, tubos de guardado para insectos y ninfas y alcohol al 70%. En tanto, el Senasa recordó que es obligatorio denunciar cualquier sospecha de HLB, comunicándose de forma gratuita al 0800 999 2386 o enviando un correo electrónico a [email protected].

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