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Fecha: 12/09/2024 05:21
La devoción católica a la Santa Cruz se remonta a los primeros siglos del cristianismo, ya que la cruz es un símbolo central de la fe cristiana. Fragmentos de la Cruz guardados en un relicario de 1800, en la Basílica de la Santa Cruz en Jerusalén de Roma. Sin embargo, la festividad específica de la Exaltación de la Santa Cruz el 14 de septiembre tiene sus raíces en la historia de la Iglesia. La fecha del 14 de septiembre se estableció en honor al descubrimiento de la verdadera cruz de Jesucristo por parte de Santa Elena, madre del emperador Constantino, en el siglo IV. Según la tradición, Santa Elena fue en peregrinación a Tierra Santa y encontró la cruz en la que Jesús fue crucificado. Los fragmentos traídos por la Santa se conservan actualmente en la Basílica de la Santa Cruz en Jerusalén de Roma, muy cerca de la Basílica Pontificia de San Juan de Letrán. El descubrimiento de la Cruz de Cristo. https://youtube.com/watch?v=YsLpy1wIR7s%3Ffeature%3Doembed La celebración de la Exaltación de la Santa Cruz el 14 de septiembre conmemora este evento significativo en la historia de la Iglesia. ¿Por qué celebramos la Exaltación de la Santa Cruz? La fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz conmemora dos hechos históricos. El primero es el descubrimiento, en el año 320, de la verdadera cruz, del Calvario y de la tumba de Cristo. Santa Elena los encontró bajo un templo erigido a la diosa Venus, donde habían sido enterrados por los romanos. El Segundo acontecimiento que origina la celebración de esta fiesta es la dedicación de una iglesia en ese lugar en el año 335. Hoy en día, esa iglesia, que existe desde entonces, recibe el nombre de Basílica del Santo Sepulcro, y alberga el Calvario, la tumba de Jesús y la cisterna en la cual Santa Elena encontró los instrumentos de la Pasión de Jesús, incluida la Cruz. Basílica del Santo Sepulcro. ¿En qué consiste la devoción? La devoción a la Santa Cruz consiste en honrar y reverenciar la cruz como el símbolo de la redención y salvación de la humanidad a través del sacrificio y la resurrección de Cristo. Honra la Cruz de Cristo, un instrumento hecho sagrado por el ofrecimiento que el Señor hizo de sí mismo para nuestra salvación. La Cruz representa la verdad de que Jesús se sacrificó por nosotros. Se venera únicamente por Quien ha sido crucificado en ella y por lo que Él nos alcanzó por medio de ella. Cuando honramos o exaltamos la Cruz, lo que hacemos los católicos es principalmente reconocer a Cristo mismo (2do Concilio de Nicea). El Catecismo de la Iglesia Católica, en su párrafo 617 afirma: «Por su sacratísima pasión en el madero de la cruz nos mereció la justificación» enseña el Concilio de Trento subrayando el carácter único del sacrificio de Cristo como «causa de salvación eterna». Y la Iglesia venera la Cruz cantando: «Salve, oh cruz, única esperanza». Los fieles expresamos nuestra devoción mediante oraciones, actos de reverencia y meditación en la Cruz de Cristo. Algunas de las oraciones tradicionales asociadas con esta devoción incluyen: Oración de la Santa Cruz: «Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos, Señor, Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.» Oración ante la Cruz: «Señor Jesús, por tu santa cruz redimiste al mundo. Te pedimos tu bendición para que esta cruz (o este crucifijo), sea para nosotros señal de salvación y amor. Porque tú eres nuestra paz y nuestra vida; contigo estamos seguros. Tú eres nuestra esperanza, Tú eres nuestra Resurrección. Amén.» Oración de los mil Jesús: Esta devoción consiste en invocar el Nombre de Jesús mil veces para derrotar de las casas a las huestes del mal. Podemos rezar los mil Jesús de la siguiente manera: Nos persignamos. Por la señal de la Santa Cruz de nuestros enemigos líbranos Dios nuestro en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. En silencio pedimos la gracia que se quiere. Rezamos el Acto de Contrición Rezar el Padrenuestro. Al empezar la decena se dice: “Santísima Cruz, mi abogada has de ser, en la vida y en la muerte me has de favorecer. Si a la hora de mi muerte el demonio me tentare, le diré: Satanás, Satanás, conmigo no contarás ni tendrás parte en mi alma, porque dije mil veces Jesús”. Se pasan todas las cuentas del rosario diciendo Jesús, Jesús, Jesús… (50 veces) y cuando haya terminado de contar un rosario completo se dice un Gloria, un Padrenuestro y la oración final. Cuando se hayan contado los 20 rosarios, se terminan los mil Jesús. Oración final Te adoramos, oh, Cristo, y te bendecimos, que, por tu Santa Cruz, redimiste al mundo. Jesús, Jesús, Jesucristo. Oh Jesús, mi Jesús por siempre. Jesús, Jesús en mi vida, Jesús, Jesús en mi muerte. Dulce Jesús, sé mi Jesús y sálvanos. Oremos Oh, Dios, que, al recordar hoy el descubrimiento de la verdadera cruz, renovaste los milagros de tu pasión, concédenos que por el valor de aquel sagrado leño de vida alcancemos eficaz socorro y ayuda del cielo para la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo, que contigo vive y reina por los siglos de los siglos. Amén. Además de estas oraciones, la devoción a la Santa Cruz también puede incluir la práctica de hacer la señal de la cruz, participar en la celebración de la Exaltación de la Santa Cruz el 14 de septiembre, y meditar sobre el sacrificio de Jesucristo en la cruz como acto de amor y redención. El próximo 14 de septiembre a las 15 horas el Movimiento Adonay hará la oración de los mil Jesús vía meet para todos los que deseen participar, desde la Iglesia de la Exaltación de la Santa Cruz en la localidad de Puerto Santa Cruz, provincia de Santa Cruz. Iglesia Exaltación de la Santa Cruz, Puerto Santa Cruz. “Todo nos recuerda a la Cruz. Nosotros mismos tenemos forma de cruz.” – San Juan Vianney José Nizzo / Analía Montenegro fuente : josenizzo.info
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