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  • Fonid y Conectividad suponen una cifra de $28.700 por docente – Entre Ríos Ahora

    Concordia » Entre Rios Ahora

    Fecha: 03/09/2024 02:32

    «Estamos en buen camino», dijo este lunes el ministro de Gobierno y Trabajo, Manuel Troncoso, en la primera declaración oficial en torno a la compleja negociación salarial con los docentes para el segundo semestre, que arrancó el viernes 19 de julio y que, de momento, no ha podido concluir. El Poder Ejecutivo presentó tres propuestas salariales -el 22 de julio, el 30 de julio y el 9 de agosto- pero se encontró con un cerrado rechazo desde el sector docente. Finalmente, el martes 13 de agosto decidió pagar el aumento por decreto, y así lo hizo: un 5% para julio, igual porcentaje a la inflación para agosto, elevar a $450 mil el piso mínimo, y una suma fija de $120 mil, en tres tramos de $40 mil. Solo un sindicato docente aceptó el aumento que el Gobierno presentó el 22 de julio: la minoritaria Unión Docentes Argentinos (UDA). Los otros tres, la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer), la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (Amet) y el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop), no firmaron. Agmer plantó bandera y llevó adelante 7 días de paro: 1°, 2, 6, 7, 14, 15 y 22 de agosto. Entonces, el Gobierno acudió a la Justicia y pidió la conciliación obligatoria. El jueves 22 la titular del Juzgado Laboral N° 4 María Alejandra Abud obligó a dejar sin efecto la huelga del viernes 23, y también las programadas para los días martes 27, miércoles 28 y jueves 29. El martes 27 fue la primera audiencia de conciliación ante la magistrada; la segunda, este martes 3 de septiembre. En el ínterin, este lunes se reunieron los equipos técnicos para acordar un porcentaje de pérdida salarial frente a inflación que hubo en el primer semestre. No se avanzó en ese terreno. En los primeros seis meses de 2024, el aumento de salarios fue del 68,7% de aumento provincial, pero al quitarse el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid) para un maestro de grado con 4 horas el aumento le significó un 54%. La inflación del semestre fue del 79,8%. «Estamos afinando algunos puntos de la propuesta. Creemos que estamos avanzando con muchos ítems. Un tema es consensuar un número en torno al deterioro salarial que hubo en el primer semestre. Estamos encaminados. Pero debemos cerrar cómo se hará. El Gobierno siempre tuvo la voluntad de reconocer esa pérdida, resta ponerse de acuerdo en el cómo», aseveró el ministro Troncoso. El funcionario lanzó la posibilidad de que la propuesta del Gobierno incluya la restitución del Fonid y del adicional por Conectividad: el primero surgió en los 90; el segundo, durante la pandemia para sostener la educación virtual. Se abonaba con fondos nacionales y la administración del presidente Javier Milei lo sostuvo sólo durante enero; en febrero se pagó con fondos de la Provincia. Pero a partir de marzo se esfumó del recibo de sueldos de los docentes. El Fondo de Incentivo docente representa una cifra de $16.450; el adicional por Conectividad, $12.250. Suman una cifra de $28,700 por cargo o 15 horas; se paga hasta $57.400 para 30 horas cátedra. Claro que un eventual acuerdo docente deberá incluir un armisticio en torno a los descuentos por días de paro, que desde el sábado, cuando se empezó a pagar el cronograma de agosto, han trastocado el humor de los docentes. Agmer se pronunció el sábado y los consideró un «apriete». «En eso estamos muy firmes: los descuentos se mantienen», dijo el ministro Troncoso. Ese descuento tiene dos partes: el día de descuento, que en el salario del cargo testigo, el maestro de grado sin antigüedad, suma una cifra de $12.000, y el presentismo, que son otros $6.000. El presentismo impacta hasta los primeros cuatro días descontados: $72 mil; para los otros dos -en total, seis en agosto- serían $12 mil por día, lo cual representaría una cifra total de $96 mil. El Fonid -que representa para la docencia entrerriana un 10% del salario- tiene una larga historia. Empezó a escribirse el 2 de abril de 1997, cuando la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) instaló la Carpa Blanca frente al Congreso para reclamar una ley que financiara mejoras salariales. Por entonces gobernaba Carlos Menem, y su ministra de Educación era Susana Decibe. A fines de 1998, el Congreso Nacional creó un impuesto que gravaría con el uno por ciento anual a los autos, aviones y embarcaciones. La idea era destinar esa recaudación a un aumento de los salarios docentes. Pero la iniciativa fue un fracaso: el Gobierno no logró recaudar los 660 millones necesarios para asignarles a los maestros un aumento mensual de 60 pesos. Este revés y la larga permanencia de la Carpa frente al Congreso fueron en parte los motivos que llevaron a Decibe a renunciar a su cargo, sin haber logrado superar el conflicto. El 30 de diciembre de 1999 el conflicto por el financiamiento del Fondo pareció llegar a un final. Veinte días después de asumir la presidencia, Fernando de la Rúa logró la aprobación de una ley que garantizaba el incentivo docente con fondos del Tesoro Nacional para el período 2000-2001. Ese mismo día, después de 1.003 días —dos años y nueve meses— de protesta, la Carpa fue desmantelada por maestros que se habían turnado para ayunar, artistas y otras personas que durante esos meses se solidarizaron con la lucha de los maestros. El Incentivo fue uno de los logros que consiguieron arrancarle los docentes al gobierno de Carlos Menem en 1999, tras la instalación de la carpa blanca frente a la Plaza de los Dos Congresos, que duró mil días. Aquel beneficio se pensó por un plazo de cinco años, pero todavía subsiste. Cada vez que vencía su vigencia, los sindicatos docentes conseguían una prórroga. De la Redacción de Entre Ríos Ahora

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