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» La voz
Fecha: 27/08/2024 14:56
En el juicio por jurados por el crimen del arquitecto Reynaldo Flehr, el fiscal de Cámara Fernando López Villagra pidió penas de prisión perpetua para su hija Irina Lourdes Flehr; la expareja de ella, Leandro Moscarello; y para los confesos autores del homicidio, Samuel Moscarello y David Silvestre. En cambio, al “chofer” David Suárez, a quien el fiscal considera participe secundario del homicidio, le pidió López Villagra una pena de 15 años de prisión. A Irina y Leandro Moscarello, el fiscal los considera instigadores de homicidio calificado por el vínculo, alevosía, codicia y la participación criminal de dos o más personas, agravado por el uso de arma de fuego. En cambio, a Silvestre y Samuel Moscarello no les adjudica la calificación de codicia. Irina no ha admitido nunca su culpabilidad, mientras que los señalados como los tres ejecutores del crimen han confesado su participación, pero tratando de atenuar los motivos, con malos indicios de justificación. López Villagra expuso con claridad la prueba reunida en contra de los acusados. Además, defendió la personalidad del arquitecto y sus valores morales. En segundo turno, alegó el querellante por la madre de la víctima, el abogado Marcelo Touriño, quien puso énfasis en destacar las bondades de la persona de la víctima y en incriminar a Irina y Leandro Moscarello. Discrepó con el fiscal al asignar la responsabilidad de todos los integrantes del “connubio criminal” por lo que pidió para todos prisión perpetua. Señaló Touriño que David Suárez –el chofer– fue un “partícipe necesario” por lo que le corresponde también la pena de prisión perpetua. Touriño pronunció: “Este grupo criminal se confabuló, se puso de acuerdo, aprovechando los vínculos y el conocimiento que tenían particularmente de los movimientos de la víctima”, a lo que agregó que, “para impedir que Reynaldo Flehr se casara, esto hizo que se desencadenara y acelerara el proceso de homicidio de este grupo que actuó con división de tareas”. Acusadores. El fiscal Fernando López Villagra y el abogado querellante Marcelo Touriño. (Pedro Castillo / La Voz) Durante este lunes se preveía finalizar con las conclusiones de las partes, algo que no pudo completarse. El tribunal técnico de la Cámara 8ª del Crimen de la ciudad Córdoba, integrado por los vocales Juan Manuel Ugarte (presidente), Eugenio Pérez Moreno y Marcelo Jaime, dispuso un cuarto intermedio. Al reanudarse la audiencia en horario de la siesta, la audiencia prosiguió con el turno de los defensores. Carlos Hairabedian, que asiste a Irina Flehr, se apoyó en un planteo de género y señaló que la joven fue “víctima de la violencia de su padre y de la familia de este hacia y hacia su madre”, que falleció cuando la chica tenía 12 años. Luego, machacó varias veces con que Irina sufrió violencia económica –su padre administraba sus bienes, dijo– y violencia psicológica, dos ejemplos de violencia de género. Haciendo hincapié en que nada justifica la muerte del arquitecto, el veterano penalista rechazó la posibilidad de que su defendida sea merecedora de una prisión perpetua y se inclinó por considerar “circunstancias extraordinarias de atenuación”. Tras el cierre de este alegato, tanto el fiscal López Villagra como el querellante Touriño anticiparon que replicarán a Hairabedian. En tercer orden, argumentó el defensor público Eduardo Caeiro quien planteó sendos planteos de nulidad de la acusación del fiscal y del querellante. “En horas de la mañana, se ha producido un hecho de suma gravedad; tenemos un defecto sustancial que nos cambia el hecho. Se nos ha corrido el arco”, dijo a modo de metáfora. Caeiro planteó la nulidad por considerar que acusaban alternativamente a su cliente Leandro Moscarello de instigador y de autor, lo que consideraba incongruente. Además, sostuvo: “No hay ninguna prueba directa que lo vincule a Leandro como autor y no hay ninguna prueba que lo vincule a Leandro como instigador”. Al cierre de la jornada, Nelly Baigorria defendió a Suárez e indicó que amén de ser un partícipe secundario, él desconocía que los autores Silvestre y Samuel Moscarello iban a matar al arquitecto. Por eso, le adjudicaron una participación secundaria “sólo” por un robo. Acusados. Irina Flehr, los otros acusados y los defensores. (Pedro Castillo / La Voz) La jornada se cerró antes de las 17, para pasar a un cuarto intermedio para este martes a partir de las 9. Les queda alegar a los defensores oficiales Jaime Felsztyna (por Samuel Moscarello) y a Hernán Franco Papa (por David Silvestre). Se espera que tras estas conclusiones, se sucederán las réplicas anunciadas y acaso algunas otras y hasta dúplicas. Luego de esto, es de esperar que el tribunal técnico otorgue la penúltima palabra a la mamá de Reynaldo Flehr, como víctima, y la última palabra a todos los acusados. Si esto sucede, ya se estará en condiciones el jurado popular de pasar a deliberar con el objetivo de dictar sentencia este mismo martes. La acusación Por el crimen del arquitecto responden su hija Irina Lourdes Flehr y su marido y yerno de la víctima, Leandro Moscarello. También están acusados de igual modo un hermano del yerno y dos amigos, el trío de “sicarios” que serían los ejecutores del salvaje crimen: Samuel Moscarello, David Suárez y David Silvestre. Las edades que se consignan son las que tenían los cinco al momento del asesinato, hace dos años y medio. Este trío –según la acusación– habría esperado al arquitecto la medianoche del 28 de diciembre de 2021 en el jardín de su casa, en avenida La Voz del Interior al 8000 (al noroeste de la ciudad de Córdoba), donde lo encañonaron con un arma de fuego al bajar de su vehículo. Luego, en el interior de la vivienda, lo ataron sentado a una silla, encendieron el televisor a todo volumen y le efectuaron dos disparos de arma de fuego en el rostro. Tribunal. El tribunal técnico, integrado por Marcelo Jaime, Juan Manuel Ugarte y Eugenio Pérez Moreno. (Pedro Castillo / La Voz) La imputación para los cinco acusados es un homicidio agravado por el uso de arma de fuego, calificado cuatro veces: por el vínculo (todos estaban al tanto de que Irina era hija de la víctima), por alevosía, por codicia y por la participación de varias personas organizadas. En el juicio actúa como fiscal de Cámara Fernando López Villagra, quien acusó, según la instrucción realizada por el fiscal de Violencia Familiar y de Género Cristián Griffi. Como acusador privado está el abogado querellante Marcelo Touriño, que representa a la mamá de la víctima y abuela de la acusada, Ramona de Flehr. Irina Flehr y Leandro Moscarello son considerados instigadores del asesinato. Los tres supuestos ejecutores del salvaje crimen o coautores son Samuel Moscarello (hermano del yerno de la víctima), y sus amigos David Silvestre y David Suárez. Los dos primeros encañonaron al arquitecto y lo hicieron ingresar a la casa para matarlo en su interior. Suárez, esperó en las afueras en un Ford Ka. En las últimas audiencias, los autores del crimen dijeron que habían ido a robar y que la víctima “se resistió”, pese a haber estado maniatado. Esto fue desechado absolutamente tanto por la fiscalía como por la parte querellante.
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