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» LM Neuquen
Fecha: 25/08/2024 00:55
El mercado del hidrógeno verde recién está naciendo . El primer paso fue el convenio que cerraron Alemania y Egipto bajo la plataforma H2 Global. El acuerdo no solo permitió ponerle un precio al combustible del futuro sino también dar los primeros pasos en una industria más amigable para el planeta. Según los cálculos, el gigante europeo necesitará al menos 3 millones de toneladas de hidrógeno verde para cubrir su demanda energética de cara al 2030. “Ya sabemos que a pesar de nuestros esfuerzos propios vamos a poder producir solamente una tercera parte de todo eso y dos terceras partes vamos a tener que importar”, consideró Peter Neven . El ministro de la embajada de Alemania en Argentina fue uno de los disertantes en el panel de transición energética en el marco de las actividades programadas en el “AHK On Tour Chubut: ¿Cómo hacer negocios con Alemania?”, organizado por la Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana (AHK Argentina). Los primeros pasos La demanda energética que tiene Alemania y potencial sin explotar de Argentina llevó a que la potencia europea conformara el Comité de Hidrógeno en 2022. La iniciativa empezó como un grupo de trabajo, pero el combustible del futuro despertó el interés de las compañías y la estrategia migró a realizar una reunión mensual con diferentes enfoques. La propuesta permite que se vinculen empresas que trabajan en energías renovables, proveedores de tecnología y compañías que ya tienen experiencia en el manejo de gases. También se cuenta con un sector de legales teniendo en cuenta que todavía falta mucha legislación en el sector del hidrógeno. Otro de los puntos que aborda el comité es la concientización sobre lo que podría significar el mercado del hidrógeno para el país y la realización de diferentes actividades como su propio Foro de Hidrógeno, que tendrá su tercera edición el 6 de noviembre en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Hoja de ruta El hidrógeno verde argentino despierta pasiones. Muchas empresas asociadas a la AHK tienen proyectos en carpeta y/o están realizando sus primeros estudios para poder lanzar sus propuestas. El panorama parece ser el ideal: Alemania necesita hidrógeno verde y Argentina tiene todo para satisfacer esa demanda. Entonces ¿dónde están los “peros”? Todos los actores coinciden que por más potencial que tenga el país, los proyectos no se desarrollarán sin una macroeconomía ordenada y una ley que brinde previsibilidad a las inversiones. “El RIGI tiene sus beneficios, pero no alcanza para este nuevo mercado con proyectos que demandan otro volumen de inversiones”, evaluó la gerente de Medioambiente y Energía de AHK, Annika Klump, en diálogo con +e. La Plataforma H2 Argentina (conformado entidades académicas, no gubernamentales y cámaras de empresarias como la AHK) lanzó un proyecto de ley donde se establecen las condiciones necesarias para que los proyectos de hidrógeno puedan ser una realidad en Argentina. “La propuesta refleja ese trabajo y el consenso alcanzado; nuestro objetivo es ofrecer una contribución a la necesaria evaluación y discusión parlamentaria”, subrayó la Plataforma. Parque eólico Rawson Genneia Chubut energía renovable eólica (4).jpg Una comitiva de AHK Argentina visitó el parque eólico "Rawson", que posee Genneia en Chubut. La demanda alemana y el potencial argentino Alemania lleva adelante un proceso de descarbonización de sus actividades, pero no cuenta con la capacidad para producir todo el hidrógeno verde que necesita. Esto llevó a las autoridades alemanas a lanzar una estrategia de importación que establece metas específicas de volúmenes para comercializar. Además, para impulsar el desarrollo del mercado incipiente, armó un mecanismo que se llama H2 Global donde Egipto se convertirá en el primer proveedor de hidrógeno verde para la potencia europea. El país africano enviará amoniaco verde, uno de los derivados del hidrógeno, y el Gobierno alemán realizará una nueva licitación para saber quién va a ser el off-taker final de esa producción. Argentina puede entrar de lleno a la estrategia alemana. Si bien el país es el más atrasado en el desarrollo de la industria de hidrógeno verde en Latinoamérica, el potencial de su energía renovable le permitiría posicionarse en uno de los primeros puestos del ranking mundial. “Queda mucho por hacer”, subrayó Klump. Esa premisa será una de las que se abordará en la tercera edición del Foro de Hidrógeno de la AHK. “El tema será qué mecanismos son necesarios para la aceleración del hidrógeno porque vimos que hay mucho interés, pero también necesitamos que haya un mercado sólido con previsibilidad y estabilidad”, consideró. “Queremos que los proyectos que se anuncien se puedan implementar, que la comunidad sepa de qué se tratan y sobre todo que sepan qué es el hidrógeno verde, qué significa para el lugar donde se produce y qué mecanismos necesitan a nivel internacional para acompañar el despegue del sector”, detalló la gerente de Medioambiente y Energía de AHK. Parque eólico Rawson Genneia Chubut energía renovable eólica (17).jpg Los vientos de clase mundial son un gran atractivo para desarrollar la industria del hidrógeno verde. Los interrogantes del hidrógeno Uno de los temas que genera “ruido” es la cantidad de agua que se necesita para producir hidrógeno. Klump explicó que se debe analizar el recurso del agua, pero también poner el ojo sobre el impacto ambiental donde se instalan los proyectos. “Es importante remarcar que se van a privilegiar los proyectos que impulsen la desalinización del agua de mar y los estudios ambientales correspondientes para ver qué pasa con las salmueras, entre otras cuestiones”, aseguró. “En comparación con otras industrias, el hidrógeno necesita una cantidad de agua muy reducida. Los proyectos de hidrógeno que se instalan no están impactando sobre la disponibilidad de agua potable porque no debería ser una competencia”, ponderó. Saldados los interrogantes del uso del agua, la siguiente incógnita es cómo transportar el hidrógeno. El acuerdo entre Alemania y Egipto permitirá empezar a mejorar la logística del combustible del futuro. El país del norte de África enviará su producción en amoniaco (PTX). “Como el hidrógeno tiene un volumen muy grande y transportarlo en su estado puro no cierra económica ni ecológicamente se decide transformarlo en derivados como por ejemplo el amoníaco para poder transportarlo mejor. Después en Alemania se utiliza en este estado o transformado a otros derivados o nuevamente a hidrógeno”, subrayó Klump. El panorama permite soñar con que el hidrógeno verde argentino cubra la demanda de Alemania, Europa y el mundo. Solo queda impulsar los proyectos con estabilidad y reglas claras.
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