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» Diario Cronica
Fecha: 08/07/2024 11:54
lunes 08 de julio de 2024 Huracán pareció tenerlo resuelto, pero Palazzo en una reacción, lo terminó empatando. Y el 2-2 les deja a ambos, lecturas diferentes. El Globo resta en una misión casi imposible de darle alcance al puntero y el “Aguilucho” apelando a la heroica, pareció merecerlo. Lo abrió Sáez y Leonardo San Martín, de buen rendimiento, pareció liquidarlo en el segundo tiempo, pero descontó Roque y al final, Marcos Rivadeneira selló la paridad en un partido que tuvo intensidad y no admitió distracciones. La ventaja consumada por un ex Palazzo a los 25’ fue lo más notorio en el primer tiempo ya que hasta ahí, no se habían sacado diferencias. La acción estuvo enfocada en los volantes, con una búsqueda obsesiva de la pelota y algunas buenas intenciones. Palazzo reclamó un tiro libre de Francis Bórquez que habría ingresado tras un pique al límite, no convalidado a instancias del línea cuando el juego comenzaba a armarse. La presión en la salida la ejerció el local con Rivadeneira y Palacios como ejes y con la apuesta de limitar la influencia de Nicolás Abregú y apelar a la dinámica colectiva. Al revés, Huracán ajustó para ejercer una presión más efectiva en el complemento y terminó quitándole campo de acción al local quien por momentos propuso un intercambio, aunque en la mayoría de los casos, se expuso a los intentos del Globo. Lo tuvo Barrera con un tiro libre en el travesaño; San Martín con un remate cruzado pegado al poste; Abregú con un cabezazo y un par de envíos que picaron muy cerca. Pero fue Leonardo San Martín, pieza determinante por despliegue y llegada, quien, en gran definición, superó a Lucas Rubilar para el 2-0. El partido pareció ser cosa juzgada, porque el Globo mantuvo las riendas y parecía no darle muchas opciones al rival, que sufría en la salida y le dejaba toda la responsabilidad ofensiva al solitario Pinchulef. Sin embargo, los ajustes y los cambios le dieron vida adicional al “Aguilucho”. Apareció el brasileño Welliabe Roque como un pulmón incansable para recorrer la banda y trabajar los retrocesos; Marchessi sumó piernas para sacar al equipo y todo el esfuerzo individual terminó pegando en lo colectivo. Roque remató fuerte y abajo para descontar en un momento clave, cuando asomaba alguna luz al final del túnel. Palazzo se volvió a meter en partido cuando el mismo Roque desprendió un centro que encontró a Rivadeneira liberado casi en la boca del arco para festejar una paridad merecida. Lo que tanto le había costado obtener a Huracán, se terminó resignando con malas decisiones y descuidos defensivos que se pagaron muy caro y le restaron puntos que le quitan envión a su objetivo en el campeonato: El esfuerzo de Palazzo le hizo un guiño ya que el equipo mantuvo el orden; no se dejó intimidar en los malos momentos y respondió siempre con jugadores que se prestaron, entendiendo el mensaje del técnico. Lo remó desde atrás hasta empardar, pero también teniendo la última con un doble remate de Salinas y de Pacheco que atajó Soto, como para quedarse con todo. .
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