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Parana » Analisis
Fecha: 05/07/2024 13:24
Lisandro Martínez, y su prueba en Boca Lisandro Martínez, uno de los integrantes de la Scaloneta que se probó en Boca y no quedó. El gualeyo Lisandro Martínez fue quien de cabeza que abrió el camino de la selección argentina a las semifinales de la Copa América, antes de que Ecuador llegara al empate agónico. A los 34 minutos del primer tiempo, el Carnicero de Manchester aprovechó una peinada de Alexis Mac Allister para vencer al arquero y firmar el 1-0 en Houston. Nacido el 18 de enero de 1998 en Gualeguay, Licha tuvo un paso por Boca Juniors. El entrerriano había deslumbrado a los captadores de talentos del Xeneize cuando jugaba de mediocampista en el Club Libertad de su ciudad natal. Su capacidad de manejar los hilos de un equipo desde el círculo central llamó tanto la atención de los encargados de buscar nuevas promesas que lo trajeron a Buenos Aires para que hiciera algunas pruebas en las Inferiores. “Cuando lo vimos, jugaba de cinco. Tenía un carácter bárbaro, era rápido y metía como loco”, confesó Horacio García, quien en ese momento se encargaba de coordinar el área de captación, en una entrevista con Olé. Y hasta escribió un informe que, con el diario del lunes, sonaba bastante premonitorio. “De esa prueba, elegimos a Lisandro y cuatro más. Pusimos: ‘De físico pequeño, va a cumplir 14 años. Sobresale por su gran técnica, su habilidad, su temperamento y su agresividad’”, agregó. Martínez pasó algunos testeos y filtros para saber si podía vestir la camiseta azul y oro. También le recomendaron que se moviera hacia las bandas para aprovechar mejor sus cualidades. “Nosotros pensamos que podía ser un 3 bárbaro porque era rápido y agresivo. Pero como él jugaba de 5 nos parecía que iba a ser violento decirle directamente que lo queríamos de 3. Entonces le dijimos que lo queríamos ver de volante por izquierda”, rememoró García. Si bien el captador recordó que había atravesado varias etapas y que no pudo meterse en el selectivo final porque “había un coordinador que era caprichoso”, el hombre del Manchester United reveló un detalle poco conocido de su efímera estadía en las instalaciones de Casa Amarilla. En una entrevista con ESPN, Lisandro contó: “No quedé en Boca. Tuve tres pruebas. Me acuerdo que en la última estuve dos días engripado y después de ahí no me llamaron más. Ahí me probé de volante por izquierda”. El destino hizo que el entrerriano se alejara de Brandsen 805 y se acercara lentamente a Rosario. En 2014, Newell’s Old Boys decidió apostar por él: lo fichó y lo recibió en la pensión del club. Aunque creció futbolísticamente con el sabor de las mieles del equipo de Gerardo Martino, campeón del Torneo Inicial 2013 y semifinalista de la Copa Libertadores de ese año, recién debutó en la Primera División el 27 de junio de 2017, bajo la dirección técnica de Juan Pablo Vojvoda frente a Godoy Cruz. Curiosamente, ese sería el único partido del zaguero en la Lepra. Defensa y Justicia se lo llevó a préstamo y fue figura del plantel que terminó subcampeón de la Superliga 2019. A partir de ahí, Lisandro Martínez pegó el salto al fútbol europeo.
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