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» Clarin
Fecha: 04/07/2024 06:22
Nazareno Casero está feliz. El actor volvió al teatro donde protagoniza Jardines salvajes, una comedia muy divertida, junto a Carlos Portaluppi, Mica Vazquez y Vivi Puerta en el Multitabaris Comafi. Simpático y sincero, Casero charló con VIVA sobre el trabajo, la autoexigencia, el amor y la política. -Cumpliste 38 años, ¿tuviste alguna crisis por la edad? - Los 30 me llamaron la atención por el número. Pero en realidad me siento mejor que hace 15 años. No te voy a decir que estoy más maduro porque no necesariamente el paso del tiempo significa una evolución en las personas. Pero sí me pasa que cuando hago un racconto digo: “Pará, viví un montón de cosas, viajé un mucho, conocí gente, la viví, crecí”. - Estás protagonizando Jardines salvajes en el Multiteatro Comafi. ¿Por qué no hiciste tanto teatro? - No hacía teatro desde el 2017. Por cuestiones de agenda, más que nada. Hice dos series, Impotente y Las reglas del boxeador, y filmé Reflejado. El teatro requiere un tiempo y un espacio. Es un gran entrenamiento y te ordena. Suelo escaparle a la rutina y a ese orden, pero también es necesario. Actualmente, por ejemplo, termino la función, me voy rápido a mi casa, me cambio y voy al gimnasio. Después, cenita en casa y al rato, a dormir. Es buscarle la vuelta. Nazareno Casero, Mica Vázquez, Vivi Puerta y Carlos Portaluppi, en Jardines salvajes. Foto: Soy Prensa. - Leí que tenés licencia de piloto de avión, ¿cómo eso eso? - No todavía. Empecé el curso y tengo que retomarlo. La aviación me gusta desde chico. Mi idea es tener la posibilidad de volar, alquilar un avión y dar unas vueltas. Tengo el carnet de conductor náutico y quiero sacar el de timonel. - Estás conviviendo, ¿sos fácil en la diaria? - (Risas) No, pero nos llevamos súper. Peleamos por boludeces. Ella se llama Carolina Puntonet. Es bailarina y también actúa y canta. Podemos tener roces o yo encularme, pero soy de entrar y salir del enojo de y de la alegría con facilidad. Ahora estoy enteniendo que quizás el otro tenga otros tiempos. Que me diga: 'Hoy no me hinches las pelotas' y yo me olvidé por qué. Por eso digo que no soy fácil. Pero trato de no joder y de que no me jodan. También hay cierta maduración, estoy bastante menos loco que hace 15 años. Antes me tomaba las cosas con más drama. - Hiciste de Maradona en la serie Maradona, sueño bendito, ¿qué sentiste al encarnarlo? - Mucho miedo, porque es gran desafío hacer de él. Miedo a no estar a la altura y a fallarle a quienes lo aman. Y mucha responsabilidad. Es un personaje interesantísimo. Nunca me quedo conforme con mi trabajo... Soy muy autocrítico. Nazareno Casero Actor - ¿Lo primero que hacés a la mañana? - Recibir los mimos de Rulo, nuestro perro, y de la gata. Nos vienen a despertar a la cama con alegría. - ¿Solés quedar conforme con tu trabajo? -Nunca me quedo conforme con mi trabajo. Siempre le podría agregar otra cosa. ¿Por qué? Uy, nos metemos en algo muy psicológico, pero creo que es una cuestión de merecimiento. Como siempre, el creer que puedo más. Estuvo bien, pero igual me pego un cinturonazo a mí mismo. Algo así. Soy muy autocrítico. - ¿Tu lugar en el mundo? -El campo. Tenemos tierras en la provincia de San Luis, donde está la casa familiar. También está el proyecto de construir e irme a vivir allá. Quiero hacerlo en breve, en la plenitud. Hay mucho por hacer y es muy divertido. Me gusta el trabajo agrícola, plantar árboles, ordeñar una vaca. Quiero construir mi casa desde cero. Nazareno Casero y su novia, Carolina Puntonet. - ¿Cómo te cae Milei? - Hacer ahora una crítica de Milei, me resulta fácil porque es lo que están todos esperando y todos le van a pegar, se lo merezca o no. A ver: me parece una payasada lo que pasó con Alberto Fernández. Fueron cuatro años de quilombo. El problema no es algo nuevo. Es muy difícil la situación que se está viviendo hace tiempo y no nos la merecemos. Me preocupa que hace años que venimos peleando para que este país salga adelante, cuando ves que en el mundo con una hectárea hacen negocios. Acá nos estamos peleando por cuestiones ideológicas cuando en realidad lo que hay que hacer es trabajar, producir, generar dinero y generar riqueza. - ¿Recordás alguna anécdota especial de tu infancia? - Tenía ocho años y nos fuimos con mi viejo (el actor, Alfredo Casero) en un gomón de rescate, motor chiquitito, desde Madryn hasta Puerto Pirámides, que son cien kilómetros y pico por tierra. Salimos a la mañana y llegamos a la tarde. La gente nos preguntaba: “¿En esto vinieron? Están locos”. En un otro viaje, apareció un banco de medusas. El motor se trababa. Recuerdo que ese día sentí la inmensidad de la naturaleza. Tuve una infancia llena de locuras. Muy aventurera. - ¿Una cuenta pendiente? - Vengo bastante al día. He hecho lo que se me ha antojado siempre. Quizás, los hijos. Lo estamos hablando con Caro. Ella tiene que relegar un poco su carrera, porque es la que en definitiva tiene que poner el cuerpo, literal. Estamos buscando el momento. El mundo es un quilombo, pero creo que hace falta traer hijos al mundo. Un pendiente pueden ser los hijos. Lo estamos hablando con Caro... Nazareno Casero Actor - ¿Es verdad que comiste víboras y cucarachas cuando te fuiste de viaje a Camboya? -Sí, y comí escorpión y gusanos en China. También probé la medusa y una especie de lagartija. No es que voy a agarrar un bicho que ande caminando y me lo coma. Pero si alguien lo cocina, lo pruebo. Existe una cultura. - Una virtud. - Ser ubicado. Trato de no hablar de lo que no sé y de no meterme donde no me llaman. Trato de no molestar. Soy respetuoso. - Un defecto. - Soy temperamental y a veces tomo decisiones en caliente. Y no me refiero al enojo, si no como que me emociono con algo que me gusta y le pongo mucho. Después, quizás, pienso que podría haber sido más amarrete, podría haber ocultado un poquito más mis cartas. Tiene que ver con la relación con el otro. A veces soy demasiado transparente. Nazareno Casero planea construir una casa en el campo. Foto: Marcelo Carroll. -¿Un miedo? - Fallarle a la gente que quiero y decepcionar a los que creen y confían en mí. -¿Qué te gustaría cambiar de vos? - La autocrítica. Estoy trabajando para bajarla un poco. Hago terapia tradicional, pero no me cierro a la astrología o a otras alternativas. Son herramientas y está bien. -¿Una palabra o una frase que te defina?
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