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» La Política
Fecha: 01/07/2024 00:39
Evo acusó a Arce de promover un autogolpe. Una interna que acumula problemas y genera una crisis en todos los niveles. El intento de Golpe de Estado en Bolivia no sirvió para sanar a un MAS herido de muerte. El desenlace de la tensa tarde de miércoles con Luis Arce abrazando a multitud en la Plaza Murillo y hablando en el balcón generó suspicacias en el evismo que empezó a defender la idea del autogolpe. Argumentos reales para creer que esto es cierto no hay pero la desconfianza entre los dos alas del gobierno agranda las teorías conspirativas mas alocadas. La raíz de la guerra interna es la candidatura presidencial de 2025, algo de lo que Evo Morales no se resigna casi como una obsesión, como contamos en esta columna. Pero volvamos al intento de golpe. "Yo sí creo que fue un montaje, que fue armado. No se si llamarlo autogolpe pero sí creo que hubo un nivel de coordinación importante entre este sector de las Fuerzas Armadas en subordinación supuestamente y el gobierno", disparó una fuente muy cercana a Evo Morales. La obsesión de Evo Morales El evismo tiene la información que el ahora detenido General del Ejército, Juan José Zúñiga tuvo contacto con gente del gobierno de Arce a altas horas de la mañana en la Casa Grande del Pueblo que reforzaría la idea de una coordinación. "Ha sido muy burdo el show que se ha armado desde el hecho de la detención de Zúñiga en cámaras de Bolivia TV o el palabreo en la puerta del presidente con Zúñiga en la puerta del Palacio Quemado sin el más mínimo protocolo de seguridad. Todo filmado en lives en Ministerio de la Presidencia, en el Ministerio del Gobierno, nos llegaron un montón de fotos, así como de los comunicadores de gobierno", insiste el evista. Ha sido muy burdo el show que se ha armado desde el hecho de la detención de Zúñiga en cámaras de Bolivia TV o el palabreo en la puerta del presidente con Zúñiga en la puerta del Palacio Quemado sin el más mínimo protocolo de seguridad. Todo filmado en lives en Ministerio de la Presidencia, en el Ministerio del Gobierno, nos llegaron un montón de fotos, así como de los comunicadores de gobierno Los leales a Evo se defienden de las acusaciones del arcismo sobre adelantamiento de las elecciones y sacan pecho: "Nos hemos vuelto a portar democráticamente. Nosotros hemos denunciado un golpe de estado, desde Evo hasta cualquier otro dirigente, nos hemos posicionado en contra de los milicos, hemos encontrado, hemos pedido y hemos recolectado pronunciamientos internacionales de todos los niveles, siempre apostamos por la vía democrática". El propio Evo publicó en sus redes: "El presidente Luis Arce engañó y mintió al pueblo boliviano y al mundo. Es lamentable que se use un tema tan sensible como la denuncia de un golpe". "Frente a esa realidad, debo pedir disculpas a la comunidad internacional por la alarma generada y agradecer por su solidaridad con nuestro país. Es importante que una investigación completa e independiente demuestre la verdad de este hecho", agregó. Del lado de Arce se muestran victoriosos y meten cizaña con algo tan delicado como la salida forzada de Evo Morales durante el golpe de 2019. "No nos escapamos, enfrentamos a los golpistas", repiten con tanto énfasis como el rechazo a la idea de autogolpe. "Golpe eran los de antes. En 2019 nos perseguían a balazos y ahora se vio todo por el live de Facebook", responden. Así es todo el tiempo, acusaciones cruzadas de golpismo o autogolpismo, un diálogo de sordos en donde la pelea es quien grita más fuerte para tener razón. Del lado de Arce se muestran victoriosos y meten cizaña con algo tan delicado como la salida forzada de Evo Morales durante el golpe de 2019. "No nos escapamos, enfrentamos a los golpistas", repiten con tanto énfasis como el rechazo a la idea de autogolpe En el medio, un bicho raro de los pocos que habitan ambas orillas pone el foco en la división del MAS y se anima a propone soluciones. "Si no se resuelve eso y no hay un Congreso reconocido por el Tribunal Supremo Electoral, esta crisis va a seguir", razona. Este dirigente está más cerca de Arce que de Evo y apunta: "¿Qué se ha pospuesto con lo de ayer? ¿Qué se ha diferido? Se ha diferido la intentona de acortamiento del mandato de Luis Arce, porque en realidad en eso está el evismo. La gente de Evo está en eso, que lleguen más rápido a las elecciones y que suceda lo que tenga que suceder, aún a sabiendas que el Tribunal Constitucional tiene inhabilitado como candidato a Evo Morales". Fracasó el golpe en Bolivia: el presidente Arce hizo detener al general Zuñiga y los militares se replegaron En efecto, los pasos para terminar con la guerra serían: Congreso del Movimiento al Socialismo, elecciones judiciales que permitan un nuevo Tribunal Constitucional que revise la decisión de diciembre de inhabilitar a Evo y en caso de que sea otra vez ungido como candidato del MAS, habilitarlo, porque no habría prohibición alguna con la elección discontinua, es decir, que puede postularse luego de un periodo fuera del gobierno. El problema es que Bolivia enfrenta esta pelea intestina combina una profunda crisis económica provocada por la falta de dólares y la inminente finalización de las reservas de gas con un paralización absoluta de las instituciones. La division del gobierno no permite la aprobación de leyes en el Congreso, la elección de los jueces que deben fallar en el caso de Evo y el Congreso partidario que defina las candidaturas. El problema es estructural y de gobernabilidad, una crisis institucional profunda que se está manifestando en todos los niveles. La ventaja para el gobierno es que la derecha también está partida en tres pedazos y el efecto del apoyo internacional puede permitir cierto respiro pero al mismo tiempo aseguran que "eso tiene fecha de caducidad, puede acabarse mañana, si las cosas vuelven a plantearse en los términos como estaban hasta antes del miércoles". Si lo de ayer no ha servido para una reconducción de conductas, estamos en las mismas", concluye una fuente harta de la interna. Una guerra en la que sobran mediadores y sólo depende de dos sectores que alimentan el odio al otro cada día con mas fuerza, no logró unirlos ni la posibilidad de un segundo golpe de estado en cinco años y se encamina a la destrucción total del MAS como instrumento político.
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