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Parana » Al Dia ER
Fecha: 30/06/2024 17:38
El representante del Sindicato de Empleados de Comercio (SIC), Mario Marcilla, ofreció un detallado análisis a la agencia APF sobre la situación actual del sector en la capital entrerriana. A pesar del reciente incremento salarial del 13,5% acordado en la última paritaria nacional, la realidad que enfrentan los trabajadores y comerciantes en Paraná es compleja y desafiante. Despidos y reducciones Marcilla informó que, a pesar de no ser una tendencia dominante, se han producido despidos en el sector. “Se dieron algunos despidos por reducción de personal más allá de los diez que fueron echados de los supermercados Hiper y Chango Más”, comentó el gremialista. Sin embargo, destacó que la tendencia no son los despidos masivos, sino la reducción de la carga horaria de los empleados como una estrategia de ajuste por parte de los empleadores. “A los empleados que actualmente trabajan 48 horas semanales les están ofreciendo que trabajen media jornada e inscribirlos bajo esa modalidad”, añadió Marcilla. Baja del consumo La baja del consumo es un fenómeno palpable en el sector comercial. Según Marcilla, la reducción del consumo es algo “lógico” en el contexto actual y se estima que, en promedio, ha sido de entre un 8% y un 10% en los últimos tiempos. “Ha mermado mucho la venta, la gente no se compra tanta ropa como antes, busca arreglarse con lo que ya tiene porque primero trata de pagar la comida y algunos impuestos”, explicó el sindicalista. Un panorama complejo El análisis de Mario Marcilla refleja un panorama complejo y lleno de desafíos para el sector comercial en Paraná. La combinación de despidos, reducción de horas laborales y la baja en el consumo son indicativos de una situación económica difícil, donde las prioridades de las familias se centran en cubrir necesidades básicas como la alimentación y el pago de impuestos, dejando en un segundo plano la compra de bienes no esenciales como la ropa. La situación descrita por Marcilla no solo pone en evidencia las dificultades que enfrentan los trabajadores del sector, sino también los desafíos que los empleadores deben gestionar en un entorno económico adverso. La flexibilidad en la carga horaria aparece como una solución temporal, aunque no ideal, para mantener el empleo y adecuarse a la demanda reducida.
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