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» El Esquiu
Fecha: 30/06/2024 11:29
domingo, 30 de junio de 2024 00:00 De acuerdo al informe “Natalidad y demanda educativa” del Observatorio de Argentinos por la Educación, realizado por Rafael Rofman, Martín Nistal y Leyre Sáenz Guillén, en los últimos 8 años, la cantidad de nacidos vivos en Argentina cayó un 36%. Esto va a resultar en caídas de aproximadamente 31% en la matrícula escolar en los próximos años. La cantidad de nacidos vivos cayó un 36% entre 2014 y 2022. En ese período la cifra bajó de 777.012 a 495.295 nacimientos por año. Esa tendencia demográfica ya está impactando en el sistema educativo, y se espera una caída de alrededor del 31% en la matrícula escolar en los próximos años. Especialistas remarcan por qué este fenómeno puede implicar una oportunidad para mejorar la calidad educativa. Entre las múltiples políticas posibles a aplicar, el estudio considera tres escenarios para aprovechar la oportunidad y mejorar la calidad educativa. El primero es mantener la cantidad de secciones (aulas), y reducir la cantidad de alumnos por aula, para favorecer la personalización de la enseñanza. El segundo es mantener la cantidad de alumnos por aula y aumentar la cantidad de docentes que ejerzan un rol de tutores. El tercero es mantener la cantidad de alumnos por aula y capacitar en forma rotativa a los docentes mientras no están al frente de una clase. La evidencia recopilada en el informe, muestra que estas tres situaciones pueden repercutir en mejoras en los puntajes de los alumnos en las pruebas estandarizadas y también permitirían impactar en mejores trayectorias académicas y laborales en el largo plazo. Siempre y cuando se mantenga y aumente la inversión, no solo en infraestructura sino en calidad y formación docente. Al respecto, Martin Nistal, coordinador de investigación de “Argentinos por la Educación”, en diálogo con Radio Valle Viejo señaló que “vienen naciendo muchos menos niños en los últimos años, para ponerlo en contexto en 2014 nacieron 777 mil chicos y eso era una tendencia bastante estable cuando miramos para atrás, sin embargo, posterior al 2014 hubo unos años de una leve caída que posteriormente se profundizó y en el 2022 nacieron 495 mil chicos, o sea un poco menos de 300 mil chicos, un tercio menos de niños”. “Una caída bastante particular compartida con Uruguay donde pasan cosas similares y en otros países del mundo hubo descensos en la natalidad, sin embargo, no a estos niveles de forma tan rápida y se da en todos los rangos etarios”, afirmó. Asimismo, expresó que “en ese contexto, dijimos que esto va a funcionar como un bono demográfico para la educación y esto porque por un tiempo, al menos al principio, va haber menos alumnos y habrá la misma cantidad de recursos, porque los docentes, las escuelas, la infraestructura se va a mantener igual. Entonces eso automáticamente aumenta la inversión por alumno que se va a hacer en los próximos años, solo por una cuestión de que nacen menos niños”. Al ser consultado, sobre si a menos cantidad de alumnos puede haber una mejor calidad educativa, indicó que “hay varios puntos para analizar para ver si eso funcionaría así, primero hay una ley de educación nacional en Argentina que dice que hay que invertir el equivalente al 6% del PBI, esa ley habla en términos de PBI y no en términos de inversión por alumnos”. “Por otro lado, también es importante marcar que el Estado es una estructura bastante poco movible en general, esta baja de la natalidad es algo que se ve de forma muy reciente y no sabemos cómo va a seguir en el futuro, entonces grandes movimientos en el Estado por esta natalidad sería la menos riesgosos en el corto plazo”, subrayó.
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