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  • Un vampiro santiagueño

    » El Liberal

    Fecha: 30/06/2024 10:53

    Transcripción de una entrevista a Jorge Celio Bustamante en 1988. Periodista: ¿Por qué se extinguieron los vampiros en Santiago del Estero? Jorge Celio Bustamante: Por el sol que hay en primer lugar. Dicen que antes cuando había más selva había más sombra, más árboles, más monte, donde se podía guarecer uno. Ahora ya no. El último del que se oyó hablar, como vampiro-vampiro, fue don Amílcar Barraza, allá por el 1880 más o menos. Mi bisabuela Eladia contaba del hijuna gran p... que le asolaba las cabras por ahí, por Figueroa, y bueno había resultado ser ése Amílcar Barraza, vampiro. No sé si habrá sido el último pero de otro yo no supe. P: ¿Dice que le comía las cabras? CB: De a poquito las dejaba como palitos, tísicas. P: ¿No atacaba a la gente? CB: Debe ser que era gente muy cristiana, no debe haber sido fácil atacarlos, no sé, aunque ella contaba también que tenía muchas novias Amílcar, y capaz que eran puras víctimas nomás P: ¿Ella, su bisabuela Eladia, lo conoció? CB: Poco, poco nomás. Dice que más de una vez lo había corrido borracho de la casa porque era amigo de los changos, de mi abuelo y sus amigos digamos, que por ahí se juntaban a jugar al truco y tomar. P: ¿Cómo lo había identificado que era él? CB: Decía que lo había visto de noche entrar, que los perros primero ladraban y después se metían a la casa lloriqueando. Y que una noche lo había visto andando afuera sin ropas, y que ella le había gritado "¡Amílcar, qué ya estás machao, cómo vas andar así, vete a tu casa! Y que el tipo había salido dando dos trancos y que se despegó del piso y ¡puf! desapareció de la vista así como si hubiera salido para arriba volando. Ah, este es el vampiro que me anda comiendo las cabras, dice que había dicho ella. P: ¿Y cómo supo que era un vampiro? CB: Porque todas las pobres cabritas le estaban marcadas típicamente, así como se dice con dos colmillos en la vena gorda. Hasta los chivos. P: ¿Y qué pasó luego que se enteró? CB: Dice que se fue a verlo al cura Bochi, el polaco, pero que él le dijo que rece mucho y que a lo sumo tire ajo por todos lados, que esa gente vampira viene de lejos y que son de antes, muy de antes, que en los libros decían que habían llegado en la época del Virreynato, imagínese usted qué peligro de gente. P: Y entonces les comió las cabras pero no les afectó a la gente, a la familia CB: Ya le digo, el tipo tenía sus novias pero en casa de mi bisabuela a nadie picó. También ella tenía todos los santos habidos y por haber y día por medio hacían sus oraciones con la gente de vecinos parajes. Estaba en todas las procesiones, los días de la Virgen todo, todo. El cura parece que iba seguido a su casa también. P: ¿Y la policía del pueblo? CB: Ah, que no había caso, al Amílcar no le entraban las balas, que una vez le habían tirado y él había salido así lo más campante. Capaz le habrán sabido tener miedo también al ver que no le hacían nada los tiros. P: Dicen que los vampiros no mueren así nomás, entonces habrá durado mucho esa situación CB: Así es como usted dice, medio inmortales son. Y bueno, mi bisabuela Eladia ha durado hasta los 82 años y murió de muerte natural como se dice. Pero también es cierto que un día el famoso vampiro Amílcar Barraza no apareció más, ni buscando cabras ni por el pueblo ni en ninguna parte Se habrá descuidado y le habrá dado el sol de frente, digo yo. Pero hay otras versiones. P: ¿Qué otras versiones, alguien que lo habrá matado con estaca? CB: No le voy a decir Muy macho tendría que haber sido quien lo haya podido pillar. Pero hay una versión aún más peor: que en una de sus andanzas por el monte al vampiro Amílcar lo habría hecho recagar el Runa Uturuncu.

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