Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Casa con historia

    Colon » El Entre Rios

    Fecha: 24/06/2024 08:32

    Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen Atención Esta imágen puede herir su sensibilidad Ver foto Compartir imágen La cadena que sostiene un portón se desliza suavemente para dar paso a una vegetación pletórica de diversas variedades de árboles, arbustos y matas, formando un degradé de verdes que surcan un camino que conduce a una casa con historia.Nos encontramos en el antiguo dominio de la familia Maxit, donde su propietaria nos recibe con gran calidez y decoro permitiendo recorrer cada espacio y contarnos su historia.A priori, y desde lejos, nos parece estar en un lugar del mediterráneo por los colores característicos que van desde el azul al blanco perfectamente combinados con un terracota destacando los alféizares y las jambas de manera magnífica.Construida con ahínco en la segunda mitad del S XIX por José Maxit, inmigrante llegado de la Chapelle d'Abondance, Alta Saboya, Francia, a la Colonia San José en 1857. Primero erigió una construcción modesta y pequeña, que se encuentra en condiciones perfectas, para luego edificar una más grande y confortable donde albergar a su familia y que consta de tres niveles con escaleras y pasadizos originales. La madera de pinotea se destaca tanto en el piso como en las gradas y techos dándoles un marco acogedor y tan característicos de la época colonial.Nos asentamos en una gran sala que otrora fuera un galpón de herramientas y allí Graciela y su hija María nos enriquecieron con la historia familiar y de la propia casa. Este espacio nos remonta, sin dudas, a un tiempo no tan lejano donde las paredes descubiertas dejan ver los antiguos ladrillos que conforman las paredes y un reloj a péndulo ha detenido sus agujas como deseando que el momento no avance tan vertiginoso y se estacione al menos en el recuerdo familiar.Este espacio, como toda la casa, ha sido restaurado con un gusto singular donde se amalgama lo antiguo con lo moderno; un sillón de antaño tapizado con géneros contemporáneos, una mesa gigante con sillas de metal trabajado o una cama de gruesa madera cubierta por un paño a rayas coloridas. Las lámparas manifiestan su época y dan un marco de originalidad que resaltan la tirantería oscura. Las ventanas , de tamaño pequeñas, se encuentran distribuidas y dispuestas de manera tal que todos los ambientes reciben luminosidad natural donde cómodamente se puede leer o simplemente observar , rememorar y meditar lo que este lugar fue.Nos desplazamos al patio, de piso con ladrillos y guijarros que contienen una magnolia o un jazmín que puja por llegar a la cima de la galería , forman una terminación impoluta digna de un acuarelista. No muy lejos un palenque de gruesa madera se yergue sosteniendo un aro de hierro, tranquilo, como esperando que un visitante amarre las riendas de un caballo.Nos detenemos a observar y recuerdan que gran parte de la casa, como lo muestra la fotografía, estuvo circundada por el agua durante la gran creciente del año 1959 devastando el lugar con la penuria de ver muebles y sembradíos arruinados.Seguimos el derrotero para volver al interior y escudriñar cada rincón sin disipar el momento. Una pintura de José Maxit vigila nuestro andar, un armario con cajoneras y más sillones enfundados en colores acordes otorgan un marco señorial.Ya partimos, damos una última mirada a la casa que se yergue clara, altiva y vertical en medio de la campiña sanjosesina, sosteniendo la historia que se aferra para no ser olvidada y formar parte de esta tradición de inmigrantes.Nuestro agradecimiento a la familia por permitir visitar y recorrer cada espacio.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por