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Concordia » Despertar Entrerriano
Fecha: 07/05/2024 08:45
En una nueva entrega de «Entrevistados» de Diario Despertar Entrerriano, con motivo al Día Mundial Del Acordeón, dialogamos con Atilio Miño quién compartió con nosotros este día tan especial para él y para todos lo que tienen la dicha de tocar este gran instrumento. Desde su natal Corrientes hasta su arraigo en Concordia, Miño nos transportó a través de su historia personal y musical, destacando cómo el acordeón ha sido una parte integral de su vida desde temprana edad. Con una mezcla de nostalgia y gratitud, Miño relata como el acordeón es testigo de alegrías y tristezas en las personas, cómo ha sido su fiel compañero en los momentos más felices y en los más difíciles. “Yo tengo dos etapas como músico en el acordeón. Mi padre fue acordeonista y tenía uno como la mía también de color rojo. Yo soy de Corrientes y a donde iba el acordeón iba conmigo, a reuniones de trabajo, reuniones con la familia. A ese acordeón de mi papá lo tenía como una reliquia y era mío”. “Cuando mi papá se iba a trabajar le usaba el acordeón, porque lo dejaba arriba de la cama y bueno, intentaba copiarlo y así fue que aprendí a tocar de todos los estilos. Cuando llego a Concordia me hice amigo de Enrique Miño y donde aprendí de música, de acordeón hasta que nos empezaron a llamar de distintos programas folklóricos para que podamos demostrar”. “Este lindo acordeón lo obtuve de una linda historia. En esos programas a los que iba a tocar conocí a Hugo Di Lello, un gran músico. Él me dijo que ‘tenía algo para mí’ y era este acordeón que es italiano original. Él le puso precio y fue como un regalo, y lo tomé así. Es por eso que le prometí que cuando me tocara hablar de este acordeón, voy a decir que fue un regalo, es como una cosa hermosa que un amigo me lo regaló.” DDE: ¿Cómo es su historia con este instrumento? AM: Cuando llegué a Concordia me encontré con que yo no sabía tocar el acordeón a piano. No tomé clases de acordeón, entonces un amigo Juan Manuel Orge, me empezó a mostrar cómo se manejaba el acordeón es por eso que con el paso del tiempo fui practicando solo, y como también tenía buen oído fue pasando por todos los ritmos. DDE: ¿Integró conjuntos de chamamé? AM: Cuando definitivamente aprendí a tocar el acordeón, el mismo Di Lello me ayudó a formar un conjunto que se llama ‘Ecos del Yuquerí’. Al practicar todos los días le fui agarrando la mano y rápido conseguimos bajista y guitarrista, donde pudimos tocar en varias ciudades de Entre Ríos y muchos puntos también de Concordia. DDE: ¿Qué significa el acordeón para Atilio Miño? AM: Es algo que nos trajeron los inmigrantes y nos marcó en la idea de que la alegría de la música es importante en la vida cotidiana. Yo trabajé toda la vida, pero el acordeón también toda la vida, fue una alegría para mi que me ayudó a conseguir grandes amistades y conocer muy buenos músicos. El acordeón une a la familia en reuniones, cumpleaños, etc. El acordeón te hace interpretar momentos tristes y alegres que es característico del ser humano. Uno puede con este instrumento transmitir tus sentimientos de alegría, tristeza. Ser acordeonista es un sentido de la música tradicional, seguir respetando y eso nos une mucho a los argentinos. DDE: ¿Cuál es la experiencia más gratificante que le dejó el acordeón? AM: Lo más lindo que me deja el acordeón es conocer a músicos que escuchaba en la radio. Al vivir en el campo escuchábamos todo por la radio. Entonces cuando me vine a la ciudad, empecé a conocer a todos aquellos que yo escuchaba, ellos iban a la AM de Concordia y cuando los veía me iban enseñando el camino por donde andar. Me fueron educando diciéndome que no me meta en los vicios y esas cosas. Son lindos recuerdos que uno siempre tiene. DDE: ¿Fue evolucionando el acordeón tecnológicamente? AM: Siempre toque con acordeones autóctonos. Lógicamente trae sus cosas, pero es para bien de la música. Lo veo como algo positivo porque hoy día se puede conectar en un amplificador, entonces no forzamos tanto el fuelle para darle un sonido fuerte, porque el acordeón se toca suave. DDE: ¿Dentro de unos años habrá personas que seguirán tocando el acordeón? AM: Si, casualmente mi hijo es profesor de acordeón y tiene muchos chicos que están aprendiendo. Hay músicos de hasta 12 años y tocan conmigo que tengo 72. El acordeón une generaciones. DDE: ¿Qué consejo le puede brindar a los jóvenes para que se animen a tocar el acordeón? AM: Todo está en la vocación que él tenga. Si vos tocas el acordeón es lo mismo que tocar el órgano o piano, al estudiar música podes tocar toda clase de instrumentos. Te invitamos a ver la entrevista completa en «Entrevistados» disponible en nuestro canal de YouTube: Diario Despertar Entrerriano.
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