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Fecha: 05/05/2024 20:16
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La historia argentina desde la vuelta a la democracia es rica en negociaciones entre los presidentes y los gobernadores de turno. Y tiene un común denominador: la plata. Es un círculo vicioso. Los jefes de Estado necesitan apoyo para sus políticas de gobierno y las leyes que envían al Congreso y los caciques provinciales requieren de los suficientes fondos para evitar ajustes y, sobre todo, mantener las obras públicas y una estructura de poder que les aseguren reelecciones. Leé también: El gobernador de Tucumán quiere hablar con Manzur para que apoye la Ley Bases en el Senado En este sentido, el peronismo tiene la musculatura lo suficientemente ejercitada producto de años de gobernar las principales provincias del país. Por eso, estos tiempos libertarios no son la excepción, sobre todo después del duro golpe que le significó a Milei haber tenido que retirar la Ley Ómnibus del Congreso y de no haber podido aprobar ningún proyecto en casi cinco meses de gobierno. Algo nunca visto desde el 83. Ahora va por la revancha, envalentonado por la media sanción que la Ley Bases tuvo en la Cámara de Diputados y los acuerdos en marcha con los gobernadores, especialmente peronistas. El Senado es el objetivo a todo o nada. El presidente sabe que no podrá contar con el apoyo del bonaerense Axel Kicillof y otros gobernadores, y que se comprometerán a evitar el apoyo de sus legisladores. (Foto: NA) El presidente sabe que no podrá contar con el apoyo del bonaerense Axel Kicillof y otros gobernadores como los de La Rioja, La Pampa, Formosa y Tierra del Fuego. Y que se comprometerán a evitar el apoyo de sus legisladores. El resto es materia de negociación, sobre todo Tucumán (Osvaldo Jaldo) y Catamarca (Raúl Jalil), mientras que Santiago del Estero (Gerardo Zamora) es el gran interrogante. Guillermo Francos, el ministro del Interior, es el gran gestor del Poder Ejecutivo para obtener el apoyo de las provincias y con cada gobernador tiene una materia diferente de negociación. Aunque también intervienen activamente el ministro de Economía Luis Caputo y el jefe de Gabinete Nicolás Posse. Con Jalil, por ejemplo, es prioritario el tema minero y, en especial, del litio para esa provincia. Se trata del régimen de incentivos para las inversiones que son fundamentales para el crecimiento de ese territorio. Aunque hay un problema adicional, porque la senadora catamarqueña Lucía Corpacci ya anticipó su rechazo a esta ley, aunque entendió la necesidad de negociar que tiene Jalil. Guillermo Francos, el ministro del Interior, es el gran gestor del Poder Ejecutivo para obtener el apoyo de las provincias y con cada gobernador tiene una materia diferente de negociación. (Foto: REUTERS/Agustin Marcarian). Otro tanto pasa con Jaldo, que se manifestó a favor de la ley. Tucumán necesita inversiones a la vez que requiere solucionar problemas que afectan a la industria del limón y la modernización de su aeropuerto, entre otras cuestiones. Un caso especial es Santiago del Estero. Para Francos, es muy importante lograr el apoyo de sus senadores y por eso dedica mucha atención a las conversaciones con Zamora, que siempre se mostró alineado con el kirchnerismo y respondió a cada pedido de Cristina cuando era presidenta. Pero cada vez que habla con Zamora, sentimientos encontrados cruzan por la mente de Francos aunque, en la Rosada, dudan que sus senadores apoyen la ley. Mucho más complejo es el panorama con los gobernadores patagónicos, enojados, entre otras cosas, por la vuelta del impuesto a las ganancias que afectará a los trabajadores de esas provincias, que tienen un mayor nivel de ingresos que otros territorios, pero también gastos superiores en su vida diaria. Un caso especial es Santa Cruz. Alicia Kirchner ya anticipó que irá por la negativa y falta saber qué harán los dos senadores que responden al gobernador y político de origen sindical, Claudio Vidal. Se trata de Natalia Gadano y José María Carambia. Leé también: En la previa al debate por la Ley Bases en el Senado, el Ejecutivo se acerca a los gobernadores patagónicos con la firma de un convenio Hay mucho en juego en la provincia. No solo el impuesto a las ganancias, sino el futuro de las represas hidroeléctricas y las actividades petroleras y carboníferas. Lo concreto es que el kirchnerismo/peronismo necesita tener encapsulados sus 33 votos en la Cámara Alta y tratar de buscar los cuatro que le faltan para rechazar el proyecto que viene de Diputados. Ya hubo un zoom entre los senadores y en las próximas horas habrá una reunión cara a cara para definir la estrategia opositora. Hoy es un gran interrogante lo que puede pasar. Por un lado, a Cristina Kirchner se la ve muy preocupada y ocupada para que no se escape ninguno de los 33. No será sencillo, pero tampoco lo será para el gobierno nacional asegurar los votos. Un escenario posible que es que apruebe en general, pero se modifiquen algunos artículos en particular, por lo que el proyecto sería devuelto a Diputados. A Cristina Kirchner se la ve muy preocupada y ocupada para que no se escape ninguno de los 33 votos que pueden frenar la Ley de Bases en el Senado. (AP Foto/Gustavo Garello) El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, que llegó al cargo de la mano de Juntos por el Cambio, ya anticipó que habrá 18 senadores patagónicos que votarán en contra del impuesto a las ganancias. Rápido de reflejos, el Gobierno nacional, a través de la Secretaría de Energía, firmó el viernes convenios con Chubut y Neuquén. Habrá más plata para el gasoducto patagónico. Lo cierto es que, a partir del momento en que la Ley Bases tuvo media sanción, se profundizó el diálogo entre la vice Victoria Villarruel, Milei y Francos, con la idea de asegurar los votos y que el 16 de mayo se intente la aprobación en el recinto. El Pacto de Mayo del 25 está a la vista y Javier Milei quiere mostrar al mundo que, aunque debilitada, su idea de la Ley Ómnibus, devenida en Bases, será una realidad. Antes, el 22, presidirá un acto en el Luna Park para presentar su libro “Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica”. Al final, resultó negocio para el libertario la pelea con la organización de la Feria del Libro. La otra parada será el próximo jueves. La CGT hará su segundo paro nacional contra Milei. Esta vez sin movilización. Huelga por 24 horas. Leé también: Guillermo Francos volvió a cargar contra la CGT por el paro del jueves 9 de mayo: “Es injustificado” Por esa razón, en la central obrera esperan una total adhesión de los gremios del transporte, sobre todo colectivos, trenes y subtes, que son vitales para poder paralizar una parte muy importante de la actividad laboral en la Argentina. Se esté a favor o en contra de la huelga. Hoy, el 9 de mayo es una puerta que tanto la CGT como el gobierno quieren atravesar lo más rápido posible, porque tienen otras necesidades en sus agendas.
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