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» El dia La Plata
Fecha: 05/05/2024 13:19
El mundo del modelaje es complejo y requiere de un gran esfuerzo no solo para las personas que se involucran. Esta afirmación es tan cierta como que quienes eligen hacer carrera en la industria precisan un apoyo constante de la familia y de las marcas que confían. En ese recorrido anda Lucía González Incorvaia, una platense que nació hace 16 años y que, al mismo tiempo que sigue los estudios secundarios en el Colegio Nuestra Señora de Lourdes, persigue su sueño de dedicarse a desfilar y hacer presentaciones, entre las tantas labores que desempeñan las personas que exhiben diseños y estilismos. En diálogo con EL DÍA, la joven, que se percibe como “modelo freelance”, comentó cómo se abrió camino al andar justo cuando el mundo atravesó una de las últimas crisis humanitarias más desafiantes: la pandemia del Covid. “Comencé un curso en 2020, cuando tenía 13 años. Recuerdo que fui a una o dos clases presenciales y luego comenzó el aislamiento social”, rememoró. También recordó que “cuando era más chica, a los 5, participé en un pequeño desfile”. “Me acuerdo que, en un verano en Pinamar, hice una pasada en un juego que hacían en un stand de una marca y me gané un llavero”, contó, en otra de las experiencias en sus inicios. Respecto a lo que la motivó a volcarse por el modelaje desde tan chica, confesó: “Elegí esta profesión porque me gusta y me apasiona la alta costura. Los vestidos me hacen sentir plena. En la pasarela, vuelo, sueño... Es muy fuerte la sensación y también es una responsabilidad, porque alguien confía que esté ahí y muestre su ropa o su marca”. “Me gusta la moda, armar oufits, que me maquillen, los peinados, hablar con los diseñadores, con otras modelos y aprender de todos. Se arman lindos equipos de trabajo entre fotógrafos, maquillaje, diseñadores, modelos, técnicos y músicos”, agregó en torno al ambiente laboral. Al ser consultada por cuáles fueron los trabajos que más gozó hacer, Lucía contestó: “El que más disfruté fue en el Tigre, en una presentación para Luis Palacios. También uno que me emocionó fue el desfile para la integración organizado por Cilsa y Pani Margot”. “La pasarela es lo que más disfruto, pero también me gusta hacer fotos”, se identificó. En referencia a su primera experiencia, recordó: “Fue en la academia Dimodell, con Janah Grinfield como directora, donde realizamos un desfile interno. A ella, que me guió en mis inicios, le estoy muy agradecida y también mi familia. Me acuerdo porque temblaba de nervios y, cuando salí a la pasarela, parecía otra persona, totalmente segura y plantada en lo que hacía”. “Generalmente se ve un resultado, pero son días y horas de ensayo. Siempre tomé profesionalmente el modelaje y doy lo mejor para lucirme, pero, también, busco que se luzca todo el trabajo que hay detrás, desde los productores, las luces, el locutor, el maquillaje y hasta el vestuario”, sumó. Concerniente al mayor desafío que enfrentan las modelos jóvenes en la industria de la moda actualmente, González Incorvaia expresó que “hay mucha competencia”. “Al ser menor de edad, si bien se pueden hacer trabajos, generalmente la edad es desde los 18. Las redes también influyen porque el público elige tal o cual persona, independientemente si es modelo o no”, analizó sobre los movimientos en el rubro en el que se desempeña. “Mi estilo es elegante, fino y de mucha prestancia. Aunque puedo desfilar cualquier estilo de ropa, me identifico con la alta costura, pero, en general, me gustan todos los estilos”, puntualizó Lucía que, tal como se observa en las imágenes luce su metro con 74 centímetros junto a medidas 81-63-89. La protagonista no solo hace modelaje, sino que también baila y participó de la Experiencia Casi Angeles, el taller “Ser otro mundo” de la academia de Cris Morena y actualmente toma un curso de perfeccionamiento con Verónica de la Canal. Alusivo a los consejos que puede compartirle a otras personas que se encuentran en un lugar parecido al suyo, la joven platense aportó que “cada personas tiene que ser como es y expresarse desde el corazón”. “No hay que compararse ni bajar los brazos. (En esta carrera) son más los ‘no’, pero hay que seguir trabajando por lo sueños… Los sueños se construyen con trabajo, disciplina, mucho amor y pasión”, manifestó. “Mi estilo es elegante, fino y de mucha prestancia. Me identifico con la alta costura” Para concluir, Lucía anheló: “Me gustaría desfilar para Versace. Amo sus desfile. También me gustaría hacerlo en Europa con diseñadores destacados. Además, quiero ser una modelo reconocida en el país y el mundo”. Por su parte, en cuanto a los apoyos que recibe, valoró: “De familiares tengo todo el acompañamiento, siempre están, me contienen, disfrutan de mis logros, pero, sobre todo, ellos están con la palabra justa cuando estoy por bajar los brazos y no continuar. Y, toda la gente con que he trabajado, siempre están para alentarme a que siga. Me dicen: ‘Tenés futuro’ o ‘seguí así’. Siempre tengo lindas devoluciones del entorno y de los equipos de trabajo”. Lucía desfiló con un vestido largo / IG @luu.gonzalez.i
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