Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Primer balance: pocas ventas en estos días, pero con la esperanza intacta

    » Clarin

    Fecha: 02/05/2024 12:16

    ¿Y…, arranca o no arranca? Es la pregunta que la mayoría formula en la Feria del Libro. Más que una preocupación, la falta de gente y el desplome de ventas es un signo de interrogación que involucra a todos los protagonistas por igual: el público general, libreros, expositores, editoriales, periodistas y, por supuesto, los organizadores de la Feria. Feria del Libro. Foto Martín Bonetto / Archivo Clarín Al cumplirse una semana de la apertura, la 48° edición de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires atraviesa por tránsito lento en el predio de La Rural, en Palermo. Que no hay plata, que es fin de mes… Se preveía un escenario de esta magnitud, aunque la ausencia de visitantes comenzó a inquietar a los organizadores. El volumen de público es dispar. Esto es, hay gente pero la Feria no está que “explota” como en otros tiempos. Lo mismo ocurre con la compra de ejemplares, que aún no se ha equilibrado. La cautela es una de las primeras maneras de persuadir la falta de público, señalan algunos con varias temporadas en la feria. Por algo será que “La Noche de la Feria” del sábado 27 abril fue el termómetro que necesitaban para medir la temperatura del ambiente. Miles de personas se acercaron de 20 a 24 ese mismo día, ya que esa franja horaria contaba con acceso gratis, en el primer sábado de la Feria. “La vieron venir” Más allá de las promociones existentes con la compra de la entrada de $3.500 (de lunes a jueves) o el ticket por $5.000 (los fines de semana) para descontar cupones de $1.000 o chequelibros por $4.000 en otras librerías después del cierre (lunes 13 de mayo), los organizadores tomaron cartas en el asunto y optaron por habilitar el “pase libre” de lunes a jueves de 20 a 22 para “inyectar” de público la Feria y poder levantar el magro nivel de ventas. Feria del Libro. Foto Martín Bonetto / Archivo Clarín A no desesperarse, ya que la baja cantidad de gente es un síntoma que se viene dando al menos en los primeros siete días en las últimas ediciones de la Feria. ¿Cómo vienen las ventas? A simple vista, se observa algunos visitantes que llevan por lo menos una bolsa con un libro adentro. Otros directamente no llevan nada, salvo el mate y el termo en la mano, elementos irremplazables para hacer la recorrida por los 45.000 metros cuadrados que tiene la Feria. En las cajas de los stands no se advierte demasiado movimiento: por lo general suelen estar vacías. Mientras, en otros stands hay vendedores conversando entre ellos. Varios stands coinciden en off en que las ventas de libros se desplomaron, como mínimo, un 40%. Incluso, mucho más de este número que asusta a más de un expositor. Pero, en on, el panorama suele ser distinto, algo más alentador, ya que hay tiempo para lograr el repunte. “Está flotando”, dijo Carolina Di Bella, encargada del stand de Galerna (stand 1010, Pabellón Verde). Desde la editorial aseguran que las ventas de su catálogo se generan a buen ritmo. En Galerna, los libros Bajar es lo peor y Alguien camina sobre tu tumba, ambos, de Mariana Enríquez, son unas de las más vendidas del stand: valen $18,900 y $16.000, respectivamente. También la Colección La otra palabra figura entre los elegidos, por solo $15.900. Mientras, Dejarte en paz (de Pata Liberati) se vende por $18.900. Además, Cartas quemadas, de Gabriela Saidón, están entre las preferidas por los lectores. El libro se consigue por $16.500. Los visitantes compran entre uno y tres libros. “La gente sabe de precios, sabe cuánto salen las cosas. Ya no se asustan, lo tienen incorporado”, reconoce Di Bella. “Si salen por debajo de los 23.000 pesos está todo OK, pero si valen más, lo piensan”, aclara la encargada de Galerna. Feria del Libro. Foto Martín Bonetto / Archivo Clarín En Aique (stand 1115, Pabellón Verde) se especializa en la venta de libros de capacitación docente. Si bien las ventas vienen en picada, mantienen la esperanza de lograr un repunte a partir del próximo fin de semana. “Esperamos que la Feria explote de gente el viernes y sábado que viene. Encima, viene la jornada de las Bibliotecas populares: el Estado les da dinero a las bibliotecas para que compren libros”, se ilusiona uno de sus encargados. Libertador Ediciones (406, Pabellón Azul), uno de los stands más grandes que ofrecen libros de saldo donde el público suele comprar libros de filosofía, entre otros. Tiene varias promos: un libro por $2.000, dos por $10.000, tres títulos por $5.000 en todas las formas de pago: efectivo, débito, crédito, QR y billeteras virtuales. “Los primeros tres días son tranquilos. Después va en aumento. De todos modos, se siente la caída de ventas aunque en estos primeros días la concurrencia de público es igual a la de 2023. ¿El precio de la entrada? Me parece cara. Está bueno que haya una franja horaria gratis”, reconoció Marisa Paviolo, encargada de Libertador Ediciones. En Aique, el público suele comprar entre uno y dos libros. La oferta es muy variada: los textos arrancan desde $6.000 hasta $200.000. Sin embargo, la media está en el rango entre $15.000 y $20.000. Feria del Libro. Foto Martín Bonetto / Archivo Clarín ¿Se puede lograr un repunte de ventas? “Faltan promociones con las tarjetas”, explica el mismo encargado. ¿De qué sirve que liberen los accesos gratis de lunes a jueves a partir de las 20? “Si vienen con plata está bien”, dijo uno de los responsables del stand, tajante. Otro panorama Distinto es el ambiente que se vive en los stands de librería Cúspide (700 Pabellón Azul y 811, en el Verde) dada la múltiple variedad de ofertas que tienen con tarjetas de crédito y de débito, lo que provoca un mayor acercamiento de público. Según los encargados, la venta de libros viene a buen ritmo, similar a la del año pasado, a pesar de que la crisis se ha profundizado. La falta de dinero, el cambio de mes y la inflación que no cesa (aunque sigue en baja) repercute en los bolsillos de los argentinos, cada vez más vacíos. ¿El secreto? La Promoción Nave, del Banco Galicia: todos los días ofrece un 40% de descuento en la compra de libros, con tope de reintegro de $50.000 y un monto máximo de $125.000. “El otro día vino un hombre que pagó $125.000 con tarjeta de crédito. Se llevó seis libros. Después, le pidió a su mujer que pagara otros $125.000 con su tarjeta para seguir comprando más libros con esta promoción”, aseguró Alejandro Costa, máximo responsable del stand de Cúspide. En el top five de ventas de libros de Cúspide figuran: Un lugar soleado para gente sombría (Mariana Enríquez, $21.500), En agosto nos vemos (Gabriel García Márquez, $19.999), La felicidad (Gabriel Rolón, $27.900), Hábitos Atómicos (Clear James) y Alas de Sangre (Rebecca Yarros, $29.900). Feria del Libro. Foto Martín Bonetto / Archivo Clarín Cabe señalar que la Promoción Nave del Galicia solamente la tienen tres stands de la feria: Cúspide, AZ y KEL. De ahí se desprende la gran cantidad de público en cada uno de estos lugares. Por eso, comenzaron a llover pedidos de otras editoriales para incorporar esta gran oferta a sus promociones vigentes. Ante la ausencia del Banco Nación, también está la promo del Banco Provincia: consiste en un 10% de descuento en la compra de libros con tarjeta de crédito hasta cuatro cuotas sin interés, sin tope de reintegro. En la 47° edición de la Feria, el mismo banco bonaerense ofrecía una promo con el 30% de descuento… ¿Cómo vienen los nuevos libros de y sobre Milei? La revolución que no vieron venir (la biografía escrita por Nicolás Márquez y Macelo Duclós con prólogo de Agustín Laje), apenas se vendieron 16 ejemplares desde que llegó este sábado. El libro vale $28.000 pero desde el stand Hojas del Sur (1222, Pabellón Verde) aseguran que se vendieron miles de ejemplares durante el primer fin de semana. En tanto, Capitalismo, socialismo y la trampa neoclásica, de Javier Milei, llegó a Cúspide el lunes pasado. Este libro que lanzó Planeta escrito por el Presidente cuesta $26.900 pero apenas se vendieron 19 ejemplares en el mismo stand de la librería. ¿Cómo lo ve la gente? “Los precios están bien, hay de todo, pero no siempre son accesibles para todos”, resumió Ezequiel, docente de Villa Devoto, y agregó: “el domingo me sorprendió la cantidad de gente que había en la Feria. El libro convoca”. Respecto al ingreso gratuito, dijo que “también tendría que ser para estudiantes universitarios en todo momento. Que sea gratis tiene que ser un incentivo para comprar libros”. Facundo Ardizzi se sacaba selfies con su madre Rita Sánchez en la puerta del pabellón Azul, minutos antes de salir de la Feria. Madre e hijo son de La Plata. Tenían las manos llenas de bolsas de libros. También se llevaron una promo de tres libros por $10.000. “Si compraba otro tenía una oferta del 50% de descuento. Esta promo me la dijeron en el stand porque veían que en ese momento estaba comprando; no la tenían disponible al público”, advirtió. Los libros sobre y del presidente. Foto: Fernando de la Orden / “Los precios son como en las librerías de La Plata: no hay diferencia pero sí variedad”, remarcó el joven estudiante universitario. En Cúspide pagó $24.000 con su billetera virtual por el Volumen I de La guerra y la Paz, de Lev Tolstói. En otro stand el mismo libro se vendía a $48.000.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por