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» Clarin
Fecha: 02/05/2024 07:48
“El mindfulsex es una nueva manera de vivir la sexualidad”. Así de concisa es Emma Ribas, doctora en psicología y sexóloga, al hablar de esta práctica que busca llevar al goce a su punto máximo y que no tiene límites en lo que a edad se refiere. ¿En qué consiste? “Es aplicar el mindfulness, es decir la conciencia plena, en el área de la sexualidad. Se trata de un cambio de paradigma: es aprender a saber estar presentes sin dejarte llevar por la mente, sin juzgar, viviendo una experiencia conectada a tus propios valores”, aseguró la especialista a Clarín. Esta nueva forma de entender la sexualidad, que integra algunas prácticas milenarias de tantrismo y taoísmo, ya demostró “cambios en el cerebro a nivel estructural y funcional y que integra algunas prácticas milenarias de tantrismo y taoísmo”, añadió. Ribas destacó que el mindfulsex “es una sexualidad lúcida y despierta, un hacer el amor teniendo plena consciencia del acto amatorio en sí mismo, dejando la mente libre de cualquier pensamiento ajeno a la práctica sexual, incluida —y esto es esencial— la obsesión por alcanzar el orgasmo o por llevar a cabo algún tipo de actividad determinada en la cama”. Y amplió: “El mindfulness en el sexo es presencia, entrega, apertura, soltura, dejar de hacer, aceptar, no generar expectativas, simplemente observar sin juzgar, viviendo la experiencia tal cual es, donde todo sucede por sí mismo, sin nada más que hacer: sin ningún otro lugar al que ir. Hacer el amor con consciencia plena implica la imposibilidad de reproducir la misma situación de manera idéntica, porque la experiencia del presente es por definición irrepetible”. A la hora de mencionar quién puede practicarlo, la autora de Mindfulsex: el sexo que revolucionará tu vida (Plataforma Actual), se refirió a todas “aquellas personas que ya no disfrutan con el sexo convencional y que quieren descubrir una sexualidad mucho más consciente, placentera y conectada con sus valores”. "El mindfulness en el sexo es presencia y entrega", dijo Ribas. Foto ilustración Shutterstock. Pero sobre todo, enfatizó, está recomendada “para quienes tengan un bloqueo y piensen que la sexualidad no es para ellas. Cuando descubren el mindfulsex, fluyen porque es la vía para desbloquear muchas disfunciones sexuales”. ¿Esto incluye a los adultos mayores? Claro que sí, ya que abarca a todas las edades. “El mindfulsex es un proceso que requiere de voluntad, curiosidad y apertura mental. Para vivir la sexualidad desde el mindfulsex es necesario un cambio de chip, es decir, desaprender todos los comportamientos que hemos adquirido hasta el momento como miembros de una sociedad coitocentrista”. Los beneficios del mindfulsex La especialista dividió los beneficios entre aquellos que son del plano individual y los que son positivos para la pareja. A nivel personal, explicó, aporta vitalidad, energía sexual, autoerotismo, autoescucha, amor propio, autoestima sexual, placer, goce y alegría por la vida, autoconexión, autoconocimiento, regulación emocional, magnetismo, apertura mental, serenidad, salud, sanación de bloqueos sexuales y reducción del estrés. En cuanto a la pareja, agregó, apostar por una sexualidad más consciente “nos permitirá una mayor conexión emocional y un vínculo más profundo. También más satisfacción, placer, éxtasis, respeto, consentimiento sexual, deseo, sintonía, apertura, amor, intimidad, erotismo, sanación de heridas, comunicación fluida, empatía, entendimiento y éxtasis vital compartido. Todo ello elevará nuestro sexo al siguiente nivel, donde la exigencia es más baja y el disfrute más alto”. 3 ejercicios de mindfulsex Emma Ribas ofreció tres ejercicios sencillos de mindfulsex que incluyen abrazos, caricias y besos conscientes. La autora aseveró en ese marco que “el mindfulsex supone disfrutar plenamente de la intimidad sexual, del erotismo, de la conexión, de tu cuerpo y del de tu pareja, gracias a esa atención total en el momento presente y a la magia que se crea en el proceso mismo de practicar el sexo”. Ribas: “El mindfulsex es una nueva manera de vivir la sexualidad”. Foto ilustración Shutterstock. Abrazos conscientes Te recomiendo que se abracen cada día, unos minutos al menos, tratando de respirar al mismo ritmo. Si se abrazan estando de pie, pueden añadir un pequeño balanceo, como si se mecieran. Y si es en la cama, lo mismo, pero en la posición de la cuchara (uno de los dos siendo abrazado por detrás por todo el cuerpo del otro). No hay límite para la cantidad de abrazos que se den: cuantos más, mejor. Caricias conscientes Te sugiero cuatro formas de acariciar con consciencia plena a tu pareja: Deslizá un solo dedo (el que prefieras) por el cuerpo del otro, durante cinco minutos. Luego intercambien los papeles. Cuatro formas de acariciar, un ejercicio de mindfulsex. Foto ilustración Shutterstock. Deslizá todas las yemas de los dedos de ambas manos por el cuerpo del otro durante cinco minutos. Luego intercambien los roles. Acariciá el cuerpo del otro presionando ligeramente con ambas manos durante cinco minutos. Luego intercambien los papeles. Acariciá el cuerpo del otro con todas las yemas de los dedos, durante cinco minutos. Luego intercambien los papeles. Besos conscientes
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