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  • "Hogar Puente de Esperanza": la búsqueda de un refugio para los niños más vulnerables

    » Rafaela Noticias

    Fecha: 30/04/2024 18:35

    "Hogar Puente de Esperanza": la búsqueda de un refugio para los niños más vulnerables Por Redacción Rafaela Noticias En una emotiva conversación con Rafaela Noticias, Florencia Michlig y Valeria Santellan compartieron conmovedores detalles sobre su proyecto de establecer un hogar de tránsito para niños en situación de vulnerabilidad en la ciudad de Rafaela. El proyecto, gestado a partir de una profunda sensibilidad hacia niños que se encuentran en situaciones o entornos donde están expuestos a peligros o riesgos que pueden afectar su bienestar y desarrollo, encuentra sus raíces en una experiencia familiar que marcó la vida de Florencia hace más de una década. "Hace unos 10-11 años, mi familia y yo fuimos hogar de tránsito para niños que sufrían vulnerabilidad en su infancia y necesitaban ser sacados de su entorno", reveló Florencia. Durante esos años, acogieron a menores en guarda, sembrando la semilla de lo que eventualmente se convertiría en este proyecto tan significativo. La conexión con la causa también fue compartida por Gabriela Picapietra, tía de Florencia y docente comprometida con la infancia. "Gabriela siempre estuvo muy movida por esta realidad", destacó Florencia. Juntas, Florencia y Gabriela compartieron un profundo deseo de hacer más por aquellos que enfrentaban situaciones de vulnerabilidad desde temprana edad. Con el apoyo mutuo y la determinación de marcar una diferencia en la comunidad, decidieron tomar acción y acercarse a las autoridades locales, mas precisamente a la delegación de Niñez y Adolescencia que se encuentra en Rafaela. Sin embargo, se encontraron con la desoladora realidad de que no existían hogares de niños en Rafaela preparados para albergar a aquellos en situación de vulnerabilidad. "Nos animaron a poder hacer este proyecto", recordó Florencia. A lo largo del último año, el equipo se dedicó a ampliar su red de apoyo y a compartir su visión con la comunidad. En marzo del 2023, se sumaron al proyecto personas comprometidas con la niñez como Ximena Rosso, Valeria Santellan, Florencia Rusch y Alicia Spadaro, todas ellas desde sus respectivas áreas vinculadas con la infancia. Luego de recorrer el país, buscar proyectos e informarse sobre la modalidad de trabajo de diferentes hogares concordaron en que la Fundación Manos Abiertas (quien hoy las apadrina), trabaja de manera integral con las infancias y es por ello que comenzó su vínculo queriendo traer este modelo de hogar a la localidad. La importancia de este proyecto es innegable en un contexto donde las infancias enfrentan diversas formas de vulnerabilidad. "Es una realidad que se necesita muchísimo porque las infancias están siendo muy vulneradas", afirmó Florencia durante la entrevista. El impulso adicional llegó cuando Leandro Rocchia asumió como el nuevo delegado de Niñez y Adolescencia de la subsecretaría, que depende de la provincia. Rocchia convocó al equipo y, tras escuchar su proyecto, manifestó su apoyo. Brindando Esperanza y Oportunidades El proyecto del Hogar Puente de Esperanza, está destinado a brindar refugio y cuidado a niños de entre 1 y 6 años que han sido víctimas de situaciones extremas de violencia, maltrato y abuso en sus hogares. "Los niños de 1 a 6 años que son separados de sus familias por situaciones de violencia, maltrato, abusos, que no pueden permanecer en el núcleo familiar, que no tienen familia ampliada, que no tienen referentes afectivos, necesitan ser sacados de ese lugar", explicó Valeria. Estos pequeños se encuentran en una situación vulnerable que requiere una respuesta urgente y adecuada por parte de la comunidad. En la ciudad de Rafaela, la falta de hogares especializados para este grupo de edad ha sido un desafío persistente. "En la actualidad, lo único que está funcionando es lo que antes era el hogar de menores madres, donde se están alojando a niños de diferentes edades, también hay una superpoblación", destacó Santellán, señalando la urgencia de ofrecer alternativas de acogida específicas para este segmento de la población infantil. El enfoque del Hogar Puente de Esperanza es proporcionar un refugio temporal para estos niños, con el objetivo de trabajar en su bienestar y su posible reintegración familiar. "La residencia vendría a ser temporal, no es un hogar en donde quedarían demasiado tiempo". Es fundamental que estos pequeños puedan recibir el apoyo necesario para superar sus traumas y, en algunos casos, prepararse para una posible adopción. Además, Santellán enfatizó la importancia del equipo técnico que respaldará el funcionamiento del hogar. "El hogar tiene que tener un equipo técnico que trabaje la revinculación del niño", subrayó. Este equipo estará dedicado a proporcionar el apoyo emocional y psicológico necesario para cada niño, así como a facilitar los procesos de reintegración familiar o de adopción cuando sea necesario. Uniendo Fuerzas En su compromiso por brindar un refugio seguro y amoroso a los niños más vulnerables de la comunidad, el equipo detrás del Hogar Puente de Esperanza desplegó esfuerzos significativos para involucrar a la comunidad en este noble proyecto. El primer paso fue la convocatoria de voluntarios, una tarea que abordaron con dedicación y cuidado. "El año pasado tuvimos nuestra primera reunión de convocatoria, la hicimos de una manera un poco más íntima, no tan pública, a través de nuestras redes sociales y contactos", explicó Florencia. La respuesta de la comunidad fue abrumadoramente positiva, reflejando la solidaridad y el compromiso de los residentes de Rafaela con las causas sociales. Además de la convocatoria de voluntarios, el equipo se aseguró de que el proyecto llegara a todos los rincones relevantes de la comunidad. "Le hicimos llegar este proyecto a concejales, a senadores, necesitamos varios marcos regulatorios y que todos estén al tanto", señaló Florencia. La participación de empresas locales también ha sido fundamental en el proceso. "Muchas se solidarizaron con nosotros y están dispuestas a aportar económicamente", destacó Florencia. Este respaldo financiero será crucial para cubrir los costos operativos del hogar y garantizar su sostenibilidad a largo plazo. La formación de voluntarios ha sido una prioridad desde el principio. "Los niños que llegan tienen realidades muy duras y necesitan un trato adecuado", enfatizó Florencia. Es por eso que el equipo ha dedicado tiempo y recursos a reclutar y formar voluntarios en diversas áreas, desde el cuidado infantil hasta la cocina y el mantenimiento. La formación se centra en proporcionar a los voluntarios las habilidades y el conocimiento necesarios para ofrecer el mejor cuidado posible a los niños que lo necesitan. Recientemente, el equipo decidió dar un paso más en su difusión, abriendo una cuenta de Instagram para el Hogar Puente de Esperanza. "Queremos que la comunidad sepa que esto es algo que va a suceder en la ciudad y que es importante para las infancias". Este enfoque institucional busca involucrar a toda la comunidad de Rafaela y sus alrededores en este proyecto vital. En Búsqueda de un Espacio para Transformar Vidas El camino hacia la realización del Hogar Puente de Esperanza ha estado lleno de desafíos, pero el equipo detrás de esta iniciativa continúa comprometido con su misión. "El año pasado, cuando comenzamos a difundir la noticia sobre el hogar, una persona con una gran generosidad y buena fe decidió ofrecernos una casa para llevar adelante el proyecto". Sin embargo, la entrega de la casa se ha visto retrasada por diversas circunstancias ajenas a la voluntad de la persona que la ofreció. Para poder avanzar con este proyecto que anhelamos necesitamos lo más importante: UNA CASA Este retraso ha impulsado al equipo a buscar alternativas más rápidas y viables para asegurar que el Hogar Puente de Esperanza pueda abrir sus puertas lo antes posible. "Hoy nos enfrentamos al desafío de encontrar un espacio físico para el hogar", explicó Florencia. Con la necesidad urgente de cubrir esta realidad, el equipo ha intensificado sus esfuerzos para encontrar un lugar adecuado donde los niños puedan alojarse y recibir el cuidado que merecen. A pesar de los contratiempos, el equipo se mantiene optimista y comprometido con su objetivo. "Estamos en contacto con varias personas, muchas nos han ofrecido su apoyo, y nuestro grupo de voluntarios está más comprometido que nunca". Transformando vidas: El compromiso de ser un puente de esperanza para los niños vulnerables El Hogar Puente de Esperanza no solo aspira a ser un lugar de refugio para los niños vulnerables, sino también un puente hacia un futuro lleno de esperanza y oportunidades. "Queremos ser un puente de esperanza en la vida de estos niños", explicó Valeria. La meta del hogar es proporcionar a cada niño que llegue una experiencia transformadora, una oportunidad de aliviar la carga que llevan y de descubrir un mundo donde el amor y el cuidado son la norma. La formación del voluntariado es un aspecto fundamental de este enfoque. "Hacemos mucho hincapié en la formación del voluntariado, especialmente de aquellos que estarán en contacto directo con los niños". Gabriela y Alicia, ambas docentes de nivel inicial, lideran esta formación, compartiendo pedagogías y enfoques que consideran esenciales para acompañar a los niños en su proceso de sanación y crecimiento. "Cuidar al que cuida" es un lema que resuena en el equipo del Hogar Puente de Esperanza. "Es importante proteger la salud emocional y mental de nuestros voluntarios, quienes estarán profundamente involucrados en el día a día de los niños", subrayó Valeria. El bienestar del voluntariado es crucial para garantizar que puedan brindar el mejor cuidado posible a los niños que lo necesitan. La premisa fundamental del hogar es que cada niño merece una familia. "Cuanto menos tiempo pasen los niños en el hogar, mejor". El objetivo es facilitar la reintegración familiar o la adopción lo antes posible, asegurando que cada niño tenga la oportunidad de crecer en un entorno familiar amoroso y estable. El Hogar Puente de Esperanza no solo busca proporcionar un techo a los niños vulnerables, sino también un ambiente donde puedan sentirse amados, seguros y valorados. "Queremos que los niños salgan del hogar con herramientas y fortaleza para enfrentar el mundo con optimismo y esperanza", concluyó Florencia.

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