Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Teatro del Bardo cumple 25 años

    Parana » Uno

    Fecha: 29/04/2024 16:45

    La agrupación cultural y autogestiva Teatro del Bardo está cumpliendo 25 años. La misma, comenzó en abril de 1999 y fue un gran pilar para las nuevas generaciones. Cientos de actores han pasado por la Escuela del Bardo y hoy protagonizan grandes obras. “Trabajamos en torno a cuatro ejes básicos: la construcción de espectáculos, la investigación teatral, la pedagogía y la construcción de circuitos alternativos de trabajo”, destacaron. En diálogo con UNO , Walter Arosteguy y Valeria Folini, dos de sus fundadores brindaron detalles de sus comienzos y, además, analizaron el deterioro y el vaciamiento que está sufriendo el sector cultural en la actualidad y a nivel nacional. —Walter, ¿cuál es tu función dentro del grupo? —En Teatro del Bardo nos consideramos un grupo de actrices y actores que en la práctica teatral devenimos en directores, iluminadores, comunicadores, pedagogos y docentes. Esos roles que vamos ocupando, que también dentro de la grupalidad van variando, son los que creemos necesarios para que las y los integrantes podamos desarrollar una idea más abarcativa acerca de la profesión. Muchos de nosotros tenemos la suerte de vivir del teatro, entonces creemos que aprender todos estos roles ayuda a tener una visión más acabada sobre aquello que debemos hacer para poder seguir viviendo de esto, para poder seguir parando la olla. —A más de dos décadas del inicio, ¿qué sensación queda sobre el camino recorrido? —Valeria: La sensación del camino recorrido es una gran sorpresa y, a la vez,una gran admiración de nosotros mismos, de todes les que pasaron por acá, que fue una gran cantidad de gente. Algunes estuvieron un tiempo más largo o más corto pero todos aportaron a la idea de que el grupo es un organismo vivo y mutante que va buscando sus reglas de subsistencia y de organización. A medida que sus integrantes van cambiando, a medida que fuimos haciendo este camino del teatro hemos probado distintas formas de organización, distintas formas de creación, de producción, de socialización de nuestros espectáculos, siempre con una línea muy clara, nos definimos como un grupo de actores que, además dirigimos, hacemos dramaturgia, vestuario, escenografía, iluminación, sonido, y todo lo que fuese necesario. Somos un grupo de actores, de personas que queremos actuar, y que ponemos al arte de la actuación en el centro del arte teatral. Es una idea y una consigna que nos pusimos por una cuestión de deseo personal de quienes fundamos el grupo, no porque esto debiese ser así en todos los grupos, éste fue nuestro camino. Y nuestro camino, nos sirve sólo a nosotros, eso también es muy importante, que cada grupalidad va armando sus estructuras, sus estrategias, en función a los deseos y a las necesidades de aquellas personas que conforman esa grupalidad. Vemos que en el camino recorrido tuvimos mucha capacidad de adaptación a distintas circunstancias externas, pero también a muchas situaciones internas que fueron sucediendo en relación a cambios de la conformación grupal. Fuimos dos, fuimos cuatro, fuimos diecisiete, fuimos ocho, fuimos nueve, fuimos distintas cantidades de personas y distintas personas que fueron yendo y viniendo. Y eso nos ha dado mucha adaptabilidad, mucha resistencia y mucho aprendizaje. —¿Cuál fue la primera obra que realizaron? —V: Valeria: La primera obra fue Antígona, la necia, sin embargo, hay que decir que esa obra la heredamos de otro grupo anterior del que formábamos parte los fundadores de Teatro del Bardo, que se llamaba Viajeros. La primera obra que realizamos como grupo se llamó Dama Ciencia, la actuaba Gustavo Bendersky y la dirigía yo. Luego hicimos otra obra que se llamó Amarillo que es la segunda parte de una trilogía que continuaba lo construido con Antígona, la necia. Teatro del Bardo1.jpg —¿Qué importancia tiene el Teatro? —W: Tiene gran importancia porque aporta a la cultura de una comunidad y teje lazos entre sus integrantes. El arte, en este caso el teatro, es siempre un vehículo muy potente para crear lazos, sostenerlos y fortalecerlos. — V: Pensamos que, al igual que los griegos hace 2500 años, el teatro puede ser una poderosa herramienta pedagógica y de circulación de ideas. —¿Cuál fue el desafío más grande al momento de crear el grupo? —V: Imaginar a un grupo de teatro que siguiera perteneciendo a la tradición de teatro de grupo, que es muy fuerte en Latinoamérica y ha sido muy importante en nuestra formación personal y profesional, pero que no reprodujese la organización jerárquica y verticalista de los grupos que conocíamos, y de los que habíamos sido parte. En donde existía un director que dirigía no solamente los procesos creativos y pedagógicos sino también diseñaba el proyecto grupal y decidía por cada una de las personas que participaban del grupo. Por eso, el gran desafío fue imaginar que podíamos ser un grupo sin director, intentando una organización horizontal y cooperativa, basada en los deseos de los actores y actrices, y no en el plan de una sola persona. —¿Qué los hizo sostenerse en el tiempo? —V: Creemos que fue la tozudez, la convicción de que queríamos ser actores y actrices y vivir de nuestra profesión. Que era posible inventarnos un trabajo a la medida de nuestras ideas y deseos, a la medida de nuestra visión del mundo y a la medida de nuestro teatro. Por eso, encontramos en el Equipo de Educación por el Arte, que es nuestra estrategia de autogestión más importante, un campo de trabajo, de creación, de profesionalización y de socialización que nos permitió sostener las ideas fundantes del grupo, y también nuestras economías y nuestras vidas personales. Embed Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Teatro del Bardo (@teatrodelbardo) — En épocas de ajuste, ¿qué pasa con la cultura? —W: La cultura argentina está sufriendo un revés bastante importante de la mano de este gobierno que ha tomado medidas que creemos que no tienen ningún sentido, que solo son medidas que tienden a empeorar y precarizar el trabajo de muchos artistas y muchas otras personas que están alrededor, por ejemplo, la industria cinematográfica. Vemos con muchísima preocupación el futuro del Instituto Nacional del Teatro, que en la nueva Ley Ómnibus que acaba de ser aprobada, el dictamen en Diputados para ser tratada la semana próxima, le da al Ejecutivo poderes para, entre otras cosas, hacer desaparecer el Instituto que fomenta, promueve y apoya la actividad teatral en todo el país, y gracias a la cual muchísimas personas han podido acceder a bienes culturales de manera gratuita. Bienes culturales producidos por muchísimos teatros independientes de nuestro país. Así que estamos en pie de lucha. —¿Cuál fue el personaje que más disfrutaron hacer? —w: Los personajes o roles que nos toca jugar en las diferentes obras son todos muy divertidos, y la verdad es que amamos lo que hacemos. Todo lo disfrutamos, pero particularmente nos gusta, de vez en cuando, juntarnos para hacer espectáculos donde estemos muchos y muchas de nosotros. Así por ejemplo surgió en un momento Bardo Criollo que fue estrenada en el 2009 donde éramos 6 actores en escena. Luego apareció Milonga Bardera en 2017, donde también éramos ocho personas: seis barderos y barderas y dos invitados de lujo como Pablo Medici Y Ariel Micol. En el 2019 también montamos un espectáculo llamado Plan B sobre textos de Bertolt Brecht, y allí éramos diez actrices y actores en escena más dos directores. Y por último, el montaje llamado Día de muertos, donde también estuvimos seis actores y actrices en escena, ése fue un montaje de varios microteatros que realizamos el año pasado. LEER MÁS: LOS GANADORES DEL CONCURSO DE LITERATURA DE LA BIBLIOTECA POPULAR DEL PARANÁ —¿Qué sueños tiene a futuro el equipo? —V: Tenemos una cantidad increíble de sueños. Tenemos muchas ganas de que el grupo viaje, de que a nuestros espectáculos los vea mucha gente de muchos lugares distintos, tenemos muchas ganas de aprender y seguir aprendiendo otras formas de hacer teatro y otros mundos posibles dentro del teatro. Tenemos muchas ganas de encontrarnos con otras grupalidades, hacer coproducciones e intentar generar nuevos espacios de difusión del trabajo. Soñamos con seguir editando libros que den cuenta del teatro que hicimos y hacemos. Queremos, por sobre todas las cosas, tener una casa propia. Tener un lugar que podamos decir ‘es nuestro’. Y que podamos construir en ese espacio físico un montón de sueños e ideas que tenemos acerca del teatro sin tener que pensar todos los meses en cómo vamos a pagar el alquiler. Creemos que a 25 años de trayectoria ininterrumpida con más de 50 espectáculos estrenados y más de 10 coproducciones con grupos del país y del extranjero, merecemos, necesitamos y deseamos una casa propia. Ese es nuestro mayor sueño.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por