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  • Carrera a la Corte: se esperan impugnaciones mientras Lijo sumó respaldo internacional

    » Comercio y Justicia

    Fecha: 29/04/2024 08:55

    La candidatura del juez federal Ariel Lijo a la Corte Suprema sumó el respaldo del Foro Legal Internacional (ILF, por sus siglas en inglés). La entidad -una red global de abogados que defienden los derechos humanos, contra el terrorismo y el antisemitismo- lo definió como “defensor de los Derechos Humanos, la Constitución y el Estado de Derecho”. El abogado Arsen Ostrovsky, especialista en Derechos Humanos y CEO del ILF, le envió una carta al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, en la que resaltó el desempeño de Lijo y su “compromiso y seriedad” y sus “cualidades personales y morales”. “El candidato propuesto reúne las aptitudes para el cargo y doy fe de su compromiso con los derechos humanos, la defensa de la Constitución y el Estado de Derecho, como así también la dedicación puesta al servicio de la administración de justicia durante toda su trayectoria”, escribió Ostrovsky, que sumó que la experiencia de más de tres décadas de Lijo en la Justicia está “acompañada por una sólida formación académica y actividad docente en el ámbito universitario”. El 8 de mayo vence el plazo para que el Poder Ejecutivo reciba las adhesiones y oposiciones a las postulaciones de Lijo y del académico Manuel García Mansilla para la Corte. Varios magistrados y fiscales se pronunciaron a favor de los postulados por el presidente Javier Milei. Recientemente, los integrantes del fuero Penal Económico firmaron un comunicado- Uno de los jueces -Javier López Biscayart- opinó que Lijo demostró ser “un jurista de excelencia” y afirmó que tiene “un profundo conocimiento en materia legal y una habilidad innata para analizar y resolver complejas problemáticas jurídicas”. Se estima que una decena de entidades representativas de la comunidad jurídica formularán sus impugnaciones al filo del vencimiento del plazo, de forma individual. Entre ellas figuran Será Justicia; el Foro de Estudios sobre la Administración de Justicia (FORES); Poder Ciudadano y la Academia Nacional de Derecho. “Operador judicial” Algunas ya se manifestaron públicamente en contra de la postulación de Ariel Lijo, como FORES, que sostuvo que el magistrado despierta “demasiadas polémicas” en su trayectoria y por el rol de su hermano, Alfredo Lijo, a quien definó como “operador judicial”. En un duro comunicado que firmaron su titular, Alfredo Vítolo, y su secretario, Marcelo Gobbi, FORES conminó al presidente a “honrar la promesa electoral de diferenciarse de la cultura política que llevó al país a la crisis actual”. Advirtió que los ministros de la Corte no sólo deben “técnicamente idóneos”, sino también “ejemplares”. “La decadencia argentina no es únicamente económica, sino también institucional. Las instituciones han fracasado en su misión de hacer regir efectivamente los derechos y libertades constitucionales. Ello tiene un enorme impacto en la vida de los individuos y, además, obsta a las condiciones de previsibilidad que, entre otros, exigen los inversores, grandes y pequeños, para emprender actividades que generen empleo y bienestar”, planteó. “Lo que parece displicencia por ocuparse seriamente de definir el perfil que debe tener cualquier juez, y mera ligereza para analizar sus antecedentes durante los procesos de nombramiento, permite sospechar que la dirigencia política insiste en el intento de utilizar a la judicatura para fines políticos. Si un gobierno ajustara plenamente su tarea a la Constitución, nada debería temer a juristas idóneos y probos, que el país los tiene de sobra. La postulación del doctor Manuel García Mansilla para cubrir una vacante en la Corte Suprema es una prueba de ello”, sumó. Para FORES, “demasiadas son las polémicas que despierta el candidato” y apuntó a que integra “el cuestionado fuero Criminal y Correccional Federal”, cuyos tribunales –según planteó- generan “demasiadas sospechas sobre el manejo que hacen de los tiempos y del destino de las causas en las que investigan el flagelo de la corrupción pública”. FORES cerró aseverando: “Los estadistas se distinguen, entre otras cosas, por la capacidad de reconocer errores y de rectificarlos. El Gobierno tiene una oportunidad de oro para demostrar que ha dicho la verdad cuando anunció su intención de diferenciarse de la cultura política que ha llevado a la Argentina a la situación actual. Corresponde que desista de la postulación del doctor Lijo”. Denuncias Cabe recordar que ante las cuatro denuncias que pesan sobre el juez federal en el Consejo de la Magistratura de la Nación, la Coalició Cívica insistió con el pedido de investigación del accionar del magistrado. A través del diputado nacional Juan Manuel López, sus legisladores pidieron que se audite la causa penal contra el funcionario que terminó archivada. En ese entonces, Cúneo Libarona era su defensor y ahora la CC quiere saber si se instruyó correctamente la investigación y se agotaron todas las medidas de prueba respecto a la sospecha de presunto lavado de dinero. Otras seis organizaciones civiles fustigaron la postulación de Lijo. En un comunicado conjunto, entre otras, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP) y la Unión de Usuarios y Consumidores indicaron que “la Corte Suprema tiene la enorme responsabilidad de ser la garante última de la Constitución y del Estado de Derecho” y que en virtud de la trascendencia de esa misión es esencial que “esté integrada por personas cuya trayectoria refleje probada idoneidad e independencia, así como un fuerte compromiso con los principios constitucionales y los derechos humanos”. Para las firmantes, ni Lijo ni García-Mansilla satisfacen ese estándar. Respecto de Lijo citaron las “graves denuncias” en el Consejo de la Magistratura de la Nación vinculadas a falta de investigación de causas de corrupción, a dilación arbitraria de tiempos procesales y enriquecimiento ilícito, así como de una denuncia penal por asociación ilícita, lavado de dinero, coimas y tráfico de influencias, “impropias de un candidato al más alto tribunal”. Sostuvieron además la carrera judicial de Lijo es “casi el único antecedente de relevancia” que tiene ya que “el resto de su currículum vitae no muestra ningún otro mérito profesional o académico suficiente”, lo que “pone en tela de juicio su idoneidad técnica”. Aborto También cuestionaron a García Mansilla al alegar que, aunque tiene más antecedentes académicos, son “preocupantes sus visiones sustantivas sobre ciertas temáticas” que “podrían impactar en la adecuada defensa de los derechos humanos”. Las objeciones giran en torno a la posición del candidato en contra del aborto.

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