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» La Capital
Fecha: 28/04/2024 16:19
La psicóloga y fundadora de la Asociación de Altos Estudios en Violencias y Abusos Sexuales (Aevas), Bettina Calvi, señaló que tras la denuncia de Juan Pedro Aleart la entidad registró un incremento de las consultas a través de sus redes sociales La denuncia de Aleart trascendió los límites de Rosario y anima a otros a romper la barrera del silencio. La denuncia de abusos intrafamiliares realizada por el periodista Juan Pedro Aleart sacudió y conmocionó a Rosario, pero también alcanzó medios internacionales, como la BBC y el Whashington Post. Incluso referentes de la organización Adultos por los Derechos de la Infancia señalaron que tras la declaración pública del rosarino, las consultas de personas en busca de ayuda se incrementaron por primera vez. En Rosario, la especialista, doctora en psicología y fundadora de la Asociación de Altos Estudios en Violencias y Abusos Sexuales (Aevas) , Bettina Calvi, destacó "la importancia de las denuncias que habilitan la palabra a otros y eso es central, y más en momentos en los que hay quienes como el presidente (Javier Milei) hacen apología del abuso". Ms aún, señaló que también en la organización de alcance nacional desde la presentación Aleart las consultas a través de las redes sociales de Aevas , fundamentalmente Instagram, "aumentaron". Cuando recalca la "importancia" de las denuncias, Calvi explica que "los abusos justamente se sostienen en el silencio que el agresor exige. Por eso, romper ese silencio, no importa cuándo, es clave y ojalá sea lo antes posible porque de eso depende hacer cesar el abuso a través de las medidas de protección que permite la denuncia". Además, no deja de señalar el contexto actual. "Es un momento muy difícil. El propio presidente hace apología del abuso en redes sociales, un capítulo que desde Aevas incluimos en el pedido de juicio político al presidente, donde señalamos la sexualización del discurso, el contenido violento y las imágenes de sometimiento con niñes". En otros casos de trascendencia pública, como fue en 2018 la denuncia de la actriz Thelma Fardin sobre Juan Darthés , la declaración de las víctimas abre nuevos relatos . "En ese momento, me acuerdo, hubo muchos casos de mujeres que se acercaron a denunciar situaciones que habían callado durante mucho tiempo", dijo la psicóloga a La Capital. Leer más: La denuncia pública de Juan Pedro Aleart llegó a The Washington Post y la BBC Y la declaración que la semana pasada hizo el presentador rosarino también trascendió los límites de la ciudad. En medios internacionales, referentes de la organización Adultos por los Derechos de la Infancia, aseguraron tener tras la denuncia de Aleart muchas consultas de gente que buscaba ayuda por primera vez. Si bien Calvi señaló que la cantidad de presentaciones y pedidos de ayuda se mantuvieron en los niveles normales a través de los canales habituales y los consultorios, reconoció que en las consultas por las redes sociales de Aevas, y sobre todo en Instagram, se produjo un incremento. Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan que 1 de cada 5 mujeres y 1 de cada 13 hombres, a nivel internacional, reportaron haber sido sexualmente abusados antes de cumplir 18 años. En Argentina, según informes de la organización Casa del Encuentro, se estima una de cada cinco niñas y uno de cada trece niños son víctimas de abuso sexual antes de los 18 años. Además, un estudio realizado en 2014 por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos sobre denuncias de abuso sexual infantil intrafamiliar mostró que el 95% de los agresores son hombres y el 5% mujeres. También la organizaciones como Save the Children y la Red Internacional para la Prevención del Abuso y la Explotación Sexual Infantil destacan que la mayoría de los casos de abuso sexual infantil son cometidos por hombres. El patrón de las consultas Sobre las situaciones recibidas en los últimos días, la psicóloga dijo que no se trata de adultos que sufrieron abusos durante la infancia, sino de madres que piden ayuda para sus propios hijos. La especialista indicó que existe "un patrón" en los relatos de las familias que se acercan a hacer el pedido de ayuda. "Son casi siempre las madres quienes se acercan a hacer las denuncias por sus hijes, empiezan el proceso, en algunos casos se logra que se haga la Cámara Gesell y lo que sucede es que a les niñes les cuesta hablar y más si son muy chiquitos. Y allí lo que pasa es que todo se detiene porque en los casos más paradigmáticos, donde el abusador es el padre, los jueces buscan rápidamente revincular al niñe con su agresor", detalla Calvi. En el medio, la profesional señala que "la mayoría de las veces, los abusadores hacen presentaciones con sus abogados ante el Colegio de Psicólogos, denuncian a los profesionales tratantes por mala praxis, atemorizan e inmovilizan no solo a la familia, sino también a quienes llevan el caso y muchas veces son interrogados como delincuentes". Leer más: Caso Juan Pedro Aleart: La prescripción no hace más que castigar a la víctima En el consultorio, en tanto, Calvi marca que quienes más llegan son adultos que fueron chicos abusados. "En la clínica lo que vemos son pacientes abordando ya de grandes los episodios de abuso que sufrieron durante las infancias", indicó. Calvi, como lo dijo el mismo Aleart en su denuncia, detalló que son menos los varones que se acercan a denunciar e incluso a buscar ayuda durante la vida adulta. La profesional explicó eso en "los ordenadores patriarcales de la subjetividad masculina" y agregó: "Para las mujeres el abuso representa un trauma importante y catastrófico, pero no las destituye de su lugar de mujeres y de su feminidad; en los varones, en cambio, muchas veces se vive como un ataque a la masculinidad en sí misma y el modo en que lo incsiriben en su psiquismo es diferente. Por eso es muy importante el testimonio de un varón sobre lo que le pasó". Dónde denunciar Si sos víctima de violencia familiar o sexual, o conocés a alguien que la esté sufriendo, te podés comunicar las 24 horas, los 365 días del año, desde todo el país y de manera gratuita, a la línea 137 o enviar un mensaje de WhatsApp al 11-3-1331000. En Rosario, podés llamar al 0800-444-0420, todos los días, las 24 horas. Si no podés hablar, escribí al WhatsApp 341-5-781509. En caso de emergencia, llamá al 911.
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