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» La voz
Fecha: 28/04/2024 02:28
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En la Cámara 1ª del Crimen de la ciudad de Córdoba se está juzgando una vez más a Luis María Gontero Cornavaca (54) quien ha sido destituído como escribano público porque cuando ejercía realizó algunas actuaciones reñidas con la ley. Entre otras penas, una que está firme es la que se produjo en diciembre de 2021 cuando la Cámara 10ª del Crimen condenó a los miembros de la asociación ilícita “La Trenza” que copaba los remates judiciales. Él fue hallado responsable de falsedad ideológica y se le impuso una sanción de tres años y tres meses de prisión (más 85 mil pesos de multa) que cumplió parcialmente hasta alcanzar dos años y nueve meses de cárcel. Ahora, entre otros expedientes que tiene pendientes de juicio, es juzgado por el juez unipersonal Mario Capdevila por falsedad ideológica y por defraudación por circunvención de incapaces. Con la acusación de la fiscal de cámara Milagros Gorgas, la causa analiza la donación gratuita en 2013 de una valiosa casa ubicada en barrio Granja de Funes, en el noroeste de la ciudad de Córdoba. El problema radica en que Gontero Cornavaca convalidó esa cesión gratuita a un abogado -Jorge Cabrera- por parte de una mujer que tenía sus facultades mentales alteradas. Según el expediente y constatado por profesionales, la dueña de la casa se desempeñó como prestigiosa médica en un conocido hospital de la ciudad, pero fue jubilada por invalidez debido a severos padecimientos psiquiátricos. Tras algunas jornadas de recepción de prueba, este viernes se escucharon los alegatos de las partes, pidiendo la fiscal Gorgas una pena de tres años y tres meses de prisión, los que deberían unificarse -por lo que le resta de la condena anterior- en tres años y medio de encierro. Acusadores. Rubén Héctor Sánchez Quinteros, querellante, y Milagros Gorgas, fiscal de cámara. (Pedro Castillo / La Voz) Gorgas recalcó que el escribano debió haber advertido el fraude teniendo en cuenta que se trataba de una donación gratuita y completamente perjudicial para la dueña del inmueble, cuyo valor sería de unos 400 mil dólares. También reprochó la fiscal en su alegato que Gontero Cornavaca debió advertir que semejante traspaso inmobiliario se hacía a una persona que no era siquiera pariente de la mujer psicótica. Al respecto, la fiscal señaló que era evidente que su salud mental estaba alterada y que el escribano debería haberla prevenido sobre lo que estaba haciendo. Refiriéndose al cuadro de la mujer, la fiscal sostuvo que en “la entrevista necesariamente lo debió notar” y agregó que el escribano debió preocuparse de que “la persona firmante entendiese” lo que estaba haciendo. Gorgas insistió que Gontero Cornavaca incumplió con sus obligaciones como escribano y sostuvo que debería haber advertido que “había sucesivas donaciones y disposiciones de un mismo bien en un lapso corto”. A su turno, el abogado Rubén Héctor Sánchez Quinteros, querellante por familiares de la mujer, pidió una pena de cuatro años de prisión. Juez. El vocal de cámara Mario Capdevila dictará sentencia el 15 de mayo próximo. (Pedro Castillo / La Voz) En cambio, el defensor Gustavo Franco, pidió la absolución y argumentó que su cliente ignoraba que la mujer estaba enajenada. Sostuvo que no era su obligación conocer su estado mental ni tenía las facultades para hacerlo. Al finalizar la audiencia, el vocal Capdevila abrió un cuarto intermedio hasta el 15 de mayo, fecha en la que dará la última palabra al acusado y dictará sentencia.
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