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» La Nacion
Fecha: 26/04/2024 09:37
Sergio Massa y Horacio Rodríguez Larreta se vieron cara a cara después de mucho tiempo; siguen siendo rivales políticos, pero tienen más coincidencias de las que admiten en público Exclusivo suscriptores Escuchar Los dos están obligados a resetear sus carreras. Vienen de grandes frustraciones, aunque uno llegó a la final y el otro ni siquiera entró a los play off. Como profesionales de la política que son, quedaron golpeados porque “un tipo que ni siquiera tenía partido político llegó a presidente” . No juegan en el mismo espacio, ni parece posible que lo hagan en el futuro, pero comparten ahora una mirada puntillosamente opositora a la administración de Javier Milei. Tienen, además, un estilo similar: a ambos les gusta desgranar datos antes que decretar sentencias. Por etapas y con distinta intensidad, Sergio Massa y Horacio Rodríguez Larreta mantuvieron una amistad de más de 25 años, que se forjó cuando ambos se iniciaban en la actividad política, a finales de la década del ´90. La campaña presidencial de Ramón “Palito” Ortega, primero rival interno de Eduardo Duhalde y luego su compañero en la fórmula del PJ, los encontró parados en el mismo espacio. A partir de ahí sus caminos se bifurcaron -Massa siguió con Duhalde y luego con Néstor Kirchner- y Larreta armó las bases del Pro como ladero de Mauricio Macri. Pero mantuvieron la sintonía personal, que extendieron a sus familias. Y aunque siempre se especuló con que llevaban y traían la comidilla política a ambos lados del mostrador, Massa y Larreta se preservaron y es prácticamente imposible encontrar declaraciones en las que uno hable mal del otro. Esa paz concertada se rompió por un lapso breve, en los prolegómenos de la campaña presidencial de 2023. Aunque Massa no es kirchnerista, en la interna de Juntos por el Cambio (JxC) a Larreta siempre lo corrieron e incomodaron por tener un “amigo kirchnerista”. “Hace muchos años, Massa y yo elegimos caminos distintos. Las diferencias políticas nos fueron alejando incluso en lo personal” , les decía Larreta a quienes, dentro de JxC, lo emparentaban al entonces ministro de Economía. Del otro lado, el tigrense se limitaba a comentarle a los suyos: “Somos amigos, no hablamos de política” . Ambos tuvieron que dar explicaciones en un país signado por la grieta. Sergio Massa y Horacio Rodríguez Larreta Alfredo Sábat El entonces alcalde porteño tampoco tuvo mucho margen para no diferenciarse de Massa: el tigrense era ministro de Economía y futuro candidato a presidente con el kirchnerismo como uno de los principales sostenes de su postulación. Ahí tuvo lugar un primer desencuentro entre ambos: Massa le dijo a Larreta que la única forma que tenía de que su candidatura prosperara era “romper” con JxC . Por ese entonces, Macri aún coqueteaba con una postulación para volver a la Casa Rosada y Patricia Bullrich medía bien en las encuestas, mejor que el jefe de gobierno. Demás está decir que Larreta no escuchó la sugerencia que provenía del otro lado de la trinchera. Según cuentan en el entorno de Massa, fue unos días después de esa conversación que decidió avanzar con su propia candidatura . El líder del Frente Renovador siempre concibió a Larreta como un centrista que competía con él para ocupar el mismo espacio del electorado. Massa y su mesa chica analizaron que con Macri y Bullrich socavando a Larreta, el jefe de gobierno quedaría relegado. En cambio, en los planes de Massa, él tendría margen para expandir al kirchnerismo hacia sectores que naturalmente no lo votarían. Esa estrategia le funcionó al tigrense hasta las elecciones generales de octubre, que ganó con el 37% de los votos, contra 30% de Milei y 23% de Bullrich . Larreta ya había quedado marginado en las PASO de agosto, cuando sacó apenas más del 10% de los sufragios. Después ya es historia conocida: Bullrich y Macri se plegaron a Milei y sus votantes los siguieron, con lo cual el libertario ganó ampliamente el balotaje. Javier Milei reunido con Mauricio Macri y Patricia Bullrich luego de ganar el balotaje Prensa Si hubo mensajes de consuelo entre Massa y Larreta, solo ellos lo saben. Lo que sí está confirmado es que este año volvieron a verse las caras, a solas, en la casa del exministro de Economía en Tigre , en un encuentro del que ninguno de los dos quiere comentar demasiado. Algo facilitó el acercamiento: Larreta alquiló una casa de fin de semana en la misma zona en la que vive Massa. Ante una consulta de LA NACION, colaboradores del exjefe de gobierno aclararon que sigue teniendo su residencia principal en la ciudad de Buenos Aires. “En los últimos meses se hizo tiempo para reuniones, una de ellas con Massa. Más allá de que puedan hablar sobre algún tema en particular, sus caminos políticos son distintos“ , agregaron en referencia al encuentro. Sin embargo, comparten más criterios de los que surgen a primera vista: uno es que están en pleno armado de sus fundaciones para transitar la etapa política en el llano. Massa la montó en la misma sede del FR en Retiro, mientras que Larreta se afincó en Palermo. Otra coincidencia: los dos facilitan información a los gobernadores e intendentes de su espacio . Ambos ponen, además, un ojo en el exterior. Massa trabaja para un fondo de inversión con intereses en países de América y de África, lo que lo lleva a estudiar no solo la realidad económica sino también política ajena a la Argentina. Larreta, por su parte, acaba de viajar a los Estados Unidos para dar clases en la universidad de Harvard, sobre gestión de ciudades y para “dialogar con expertos que estudian los desafíos y oportunidades del complejo mundo de hoy”. Estará en Boston las próximas dos semanas. Este año dio una charla en Columbia, que compartió con Juan Schiaretti y María Eugenia Vidal. En los últimos días, Massa y Larreta tuvieron otra coincidencia de posicionamiento: ambos se pronunciaron a favor de la universidades públicas frente al desfinanciamiento que las perjudica en medio del ajuste fiscal que ejecuta el gobierno nacional. El exalcalde porteño viene de automarginarse de la nueva conducción del Pro, que encabeza Macri, porque “no está de acuerdo con la idea de entregar el partido a Milei” . Sus exalfiles, como la propia Vidal y Diego Santilli, quedaron del lado de Macri. Massa se mofa de ese sector del Pro. Comenta que en la Casa Rosada los llaman “el grupo Linkedin”, porque “buscan trabajo en el gobierno”. Pero en los diálogos que mantiene con dirigentes de todos los sectores, nunca dice nada que pueda herir a Larreta. Por el contrario, lamenta su extravío político y considera que está en una situación muy dificultosa porque su propio partido le dio la espalda. El porteño, a su vez, sigue “convencido de los valores fundacionales de Pro, que no son compatibles con Milei” , dice a quienes lo quieran escuchar. Y acota: “En el balotaje mi opción fue el voto en blanco, porque no estaba de acuerdo con Massa ni con Milei”. En tiempos de reconfiguración del campo opositor, Larreta parece más encaminado hacia un acuerdo con los cordobeses Schiaretti y Martín Llaryora, y el santafesino Maximiliano Pullaro, mientras que Massa mantiene su alianza con Cristina y Máximo Kirchner, pero no descuida conversaciones con otras fuerzas. Igualmente, tienen otra coincidencia de fondo: ninguno cree necesario armar desde ahora una alianza para 2025. “Estamos en tiempos de liquidez política” , sostienen y dejan la pelota picando, pero ni siquiera amagan con rematar.
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