Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Urribarri y García. Un blanqueo

    Parana » Pagina Politica

    Fecha: 25/04/2024 13:16

    Los acontecimientos de los últimos días sobre el caso Sergio Urribarri no se condicen con el camino que fue trazando la historia. Una imagen habitual en la política es que los amigos de antes pueden ser, perfectamente, los enemigos de ahora. Y los elementos para justificar esa transformación, perfectamente manipulables. En ese trance la prensa juega un rol fundamental porque es quien presenta, a gusto y ante el público, los hechos. Son quienes contornea el sentido común. Nota al pie para entender estos procesos: se recomienda leer la novela El mago del Kremlin, de Giuliano da Empoli. El ex gobernador no necesariamente debería estar, en este preciso momento, en una unidad penal cumpliendo la condena de 8 años. Si se repasan las crónicas judiciales de la semana pasada, cuando se le notificó que no se le abría la queja, el médico de Gualeguay José Massad Kaplan corrió con una suerte similar. El Superior Tribunal de Justicia (STJ) no le concedió la queja, dejó firme la condena de 9 años por abuso sexual, pero quedó en libertad con 10 días hábiles para presentar el recurso extraordinario. El ex mandatario – a través de su defensor Fernando Burlando – anunció que denunciará a Jorge Amilcar Luciano García. Hasta el momento, las críticas y denuncias públicas habían llegado sólo a algunos fiscales y al Ministerio Público Fiscal, pero de manera genérica. El procurador general fue un aliado de Urribarri durante años, e incluso una vez que éste ya no era inquilino del Poder Ejecutivo. Como reveló Página Política, García salió al salvataje del ex gobernador cuando vio que lo que tenía el disco rígido secuestrado en una de las empresas que se le adjudicó a su cuñado Juan Pablo Aguilera expandía una mugre que llegaría a estadíos inmanejables. Lo que luego ocurrió. La propuesta del procurador fue una condena de 4 años para Aguilera y ficha limpia para todos los demás. Sin culpa y cargo. Pero la buena relación de García con Urribarri tiene otros antecedentes. El episodio data del 4 de junio de 2015. Ese día era la audiencia pública del concurso 147 en el Consejo de la Magistratura para titularizar los cargos en la Cámara de Casación Penal de Paraná. En esa oportunidad, el entonces secretario de Justicia y presidente del organismo, Rubén Virué, le preguntó a la concursante Marcela Badano si no produciría un inconveniente su integración al ser pareja del procurador, ya que esa relación podría desembocar en reiterados pedidos de recusación. La doctora se ofendió, le hizo saber a su pareja de la supuesta incómoda pregunta que le había hecho Virué. García se comunicó con el ministro de Gobierno, Adán Bahl, que lo puso en tema a Urribarri. A las pocas horas, el Gobernador le pidió la renuncia a su funcionario. Aquí la crónica. García es un cuadro jurídico, con reconocimiento fuera de las fronteras entrerrianas. Se relaciona con algunos popes del Derecho Penal, ha firmado solicitadas en defensa de Daniel Rafecas y, cuando el kirchnerismo estaba en el poder, se jactaba de tener un ida y vuelta con Eugenio Zaffaroni. Además de esas relaciones en la comunidad judicial, el procurador se mueve en la política de manera muy hábil. No es un referente de la antipolítica como su público y seguidores creen que es y por eso simpatizan. Es una diferencia importante que tiene con la abogada Cecilia Goyeneche, que lo supo acompañar en la Procuración. La doctora se ofendió cuando en La Nación le preguntaron si una vez fuera del Poder Judicial le gustaría participar en política. García, en cambio, ha hecho enormes esfuerzos por salvar al sistema. Si la causa de los contratos truchos no tiene a ningún dirigente que presidió las cámaras de la Legislatura imputado (incluido Urribarri), es porque el procurador se encargó que esto no sea Macondo. García es el Gavin Stevens de William Faulkner en el libro de cuentos Gambito de Caballo. Stevens es el fiscal del condado de Jefferson dispuesto a administrar las flaquezas y excesos del poder en Yoknapatawpha, un pueblo ficticio creado por el escritor norteamericano en el que se desarrollan varias de sus obras. Por todas estas cosas es que la denuncia de Urribarri contra García es, por lo menos, injusta. El ex gobernador ha denunciado en estos últimos días otras cosas y a otros. Tiene también más historias para contar, con elementos rastreables y confesables, pero en la mayoría de los casos le jugarían en contra en buena medida. Urribarri dejará en el plano de la historia judicial moderna de Entre Ríos dos puntos a subrayar, que se conjugan: haberse convertido en el primer gobernador condenado con una pena de cumplimiento efectivo; y haber dotado al Ministerio Público Fiscal de presupuesto, recursos y personal como no se registra en los últimos 20 años de gobernanza de su fuerza política. Fuente: Página Política

    Ver noticia original

    También te puede interesar

    Examedia © 2024

    Desarrollado por