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  • Júpiter y Urano en Tauro: la gran conjunción de 2024 que augura disrupción y coraje

    » Clarin

    Fecha: 18/04/2024 07:06

    Las últimas horas del sábado 20 de abril de 2024 se dará la conjunción de Júpiter y Urano en Tauro, uno de los grandes eventos astrológicos del año. Ambos planetas coinciden en el grado 21 del segundo signo zodiacal, un tránsito planetario que anuncia creatividad, caos, genialidad y saltos inesperados. “Júpiter y Urano se encuentran en conjunción cada 14 años, la última vez coincidieron en el signo de Aries, en junio de 2010. La próxima, será en Cáncer en febrero de 2038”, dijo a Clarín la astróloga, autora y tarotista Beatriz Leveratto. Esta conjunción no es como otras. Leveratto la catalogó como uno de los “eventos protagonistas” del 2024, especialmente por lo que consideró como su posible alcance en las cartas natales de Argentina y de Javier Milei. Además, explicó el significado astrológico a nivel mundial y detalló cuáles son los signos que podrían verse más afectados a partir del evento. Qué significa la conjunción de Júpiter y Urano en Tauro Para comprender qué nos depara la conjunción de ambos planetas en Tauro es esencial conocer lo que representa cada uno para la astrología. “Júpiter, el planeta más grande del sistema solar, simboliza la expansión de todo lo que toca —explicó Leveratto—. Urano representa lo revolucionario y también la locura”. Es decir, el arquetipo de la vanguardia, la originalidad y la disrupción amplifica su energía en el signo de Tauro, tan asociado a la generación de recursos, las finanzas, la naturaleza, lo sensorial y el cuerpo. La especialista consideró que este encuentro planetario “trae un tiempo de revoluciones que se expanden por todo el planeta” y, aunque la conjunción exacta ocurre este 21 de abril de 2024, “sus efectos ya comenzaron a sentirse desde mitad de febrero y seguirán teniendo influencia hasta el sábado 25 de mayo, cuando Júpiter se irá de Tauro para ingresar a Géminis”. En palabras de la astróloga, este aspecto planetario sugiere la necesidad de despertar la conciencia para aportar mayor creatividad y libertad a nuestras vidas. A nivel mundial, dijo, requiere de mentes vanguardistas que lideren estos tiempos para motivar y guiar a las naciones a encontrar nuevas formas más distributivas de vivir en la Tierra. Júpiter y Urano en Tauro hablan de un despertar de conciencia, dijo Leveratto. Foto: ilustración Shutterstock Eso sí, aclaró que, al igual que con otros tránsitos planetarios, dependerá de cada conciencia cuánto podremos aprovechar o padecer este periodo astrológico. La humanidad puede tomarlo como una oportunidad de cambio o puede resistirse e insistir con viejas fórmulas. “Cuanto más alejados de este flujo de la vida estemos, más padeceremos este encuentro planetario, pues también expande lo incoherente y la locura”, advirtió Leveratto. Además, la especialista señala que el movimiento trae una revolución que cuestiona las “formas obsoletas de existencia y las ideologías cristalizadas”. La urgencia de esta transformación se manifiesta a través de la energía taurina, ligada a nuestros recursos, a la naturaleza, al agua, al cambio climático y también a cómo nos nutrimos y alimentamos. “La conjunción de Júpiter y Urano en Tauro fricciona la forma en que tratamos a la naturaleza y nos muestra cómo nos manejamos con los recursos económicos, cuánto disfrutamos de la vida, cuánto escuchamos a nuestro cuerpo y cuán orgánicos y placenteros pueden ser nuestros días”, señaló Leveratto. Según la astróloga, aunque este tránsito impactará a todos, los signos zodiacales que podrían verse más afectados por Júpiter y Urano en Tauro son los cuatro signos fijos: Tauro, Leo, Escorpio y Acuario. Tauro simboliza la generación de recursos, la naturaleza y el cuerpo. Foto: ilustración Shutterstock “La conjunción, a Tauro le pide cambios en todas las áreas de su vida, a Leo le propone recrear expansivamente su mundo social y laboral, a Escorpio le plantea formas más libres y creativas de vincularse, y a Acuario le expone cuán genuinas y habilitadoras son sus formas de amar y de relacionarse con su familia y su origen”, detalló. Júpiter y Urano en Tauro: cómo impacta en la carta natal de Argentina El encuentro de Júpiter y Urano en el grado 21 de Tauro cobra mucha más relevancia dentro de nuestras fronteras porque coincide con puntos sensibles tanto de la carta natal argentina como de la carta natal de Javier Milei. El presidente tiene en su carta natal a Saturno en el grado 20 de Tauro, donde ocurre la conjunción. Foto: Juano Tesone/Archivo. Según explicó Leveratto, Milei tiene a Saturno en el grado 20 de Tauro en su carta natal. “Saturno es el planeta que se asocia a la capacidad de ser autoridad, de poner orden, de armar un proyecto, de tener una respuesta madura hacia las cosas que suceden”, detalló. Entonces, “esta conjunción de Júpiter y Urano se va a hacer arriba, encima de esta capacidad de ordenar de Milei”, dijo la astróloga, quien agregó que puede dar “tanto esa oportunidad de algo bien diferente y creativo como también puede generar cierta disrupción de caos y de complicaciones”. Sumado a la configuración astrológica del presidente, la especialista destacó la propia ubicación del mapa astral argentino: “La carta natal de nuestro país tiene al planeta Saturno en el grado 23 de Acuario (regido por Urano), por lo cual también va a estar siendo protagonista, va a estar siendo muy movido por esta conjunción”. Júpiter y Urano en Tauro toca un punto sensible de la carta natal del país Foto: ilustración Shutterstock. En otras palabras, esa capacidad de poner orden, de armar proyectos, de respetar las leyes (simbolizada por Saturno) Argentina lo tiene en Acuario, que se distingue por su espíritu disruptivo, raro, creativo, revolucionario y de mucha capacidad inventiva. La astróloga indicó que, por un lado, podría ser “un momento muy importante de expansión creativa”; por otro, podría significar “caos, disrupción, locura para la comunidad argentina”. La experta también apuntó que la última vez que hubo un tránsito similar fue en el 2001, cuando Urano se ubicó sobre nuestro Saturno. Aquella vez no formaba parte del aspecto planetario Júpiter, un planeta que se asocia con la buena suerte pero que también expande todo lo que toca, bueno o malo. Ahora, “vamos a tener una capacidad de resignificar, de reordenar”, afirmó Leveratto. “Urano, esa capacidad creativa de algo bien diferente, va a encontrarse sobre nuestra capacidad de armar planes (Saturno) de la mano de Júpiter. Podría ser algo expansivo y benefactor. Ojalá le encontremos la vuelta hacia el milagro creativo para el bien de todos los argentinos”.

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